En tiempos de crisis la solidaridad es una de las armas más efectivas para sobrellevar las adversidades. El ser humano es capaz de lo mejor y buena muestra de ello es una familia gaditana, de larga tradición hostelera, que ha decidido dar un paso adelante y ayudar como mejor pueden. Por ello, han decidido perdonar el cobro del recibo del mes de abril de los cinco locales y las siete viviendas que tienen arrendados en Cádiz.

Los propietarios han tomado está medida para "evitar más perdidas en los negocios y puestos de trabajo, ya que casi todos se dedican a la hostelería, tanto los empresarios como los inquilinos", por lo que han visto cerrar sus establecimientos sin tener otra fuente de ingresos a la que agarrarse.

Tanto los locales como las viviendas se encuentran situados en el casco antiguo de Cádiz y la medida, que esta familia espera que provoque un efecto llamada entre otros dueños inmuebles de la ciudad, ha sido recibida muy bien por los inquilinos, que se han mostrado "agradecidos y emocionados, ya que les supone un gran alivio económico".

Esta bonita noticia se suma a otra protagonizada por una familia de Puerto Real que también decidió no cobrar el recibo del alquiler de los cuatro locales que arrenda mientras permanezcan cerrados por el estado de alarma.