La apnea del sueño es una enfermedad crónica. Consiste en un trastorno de la respiración durante el sueño: la musculatura de la faringe y la lengua se relajan y obstruyen el paso del aire hacia los pulmones; esto provoca pausas reiteradas de la respiración. El cerebro de la persona que lo padece, para impedir el ahogamiento, reacciona con despertares de alarma que el afectado no suele percibir. Estos despertares repetidos producen un descanso de baja calidad y la persona se encuentra más cansada durante el día, le cuesta concentrarse y suele tener tendencia a dormirse con facilidad mientras lee, ve la tele o incluso mientras conduce.

El abordaje de esta enfermedad es multidisciplinar, según el doctor en Medicina y Cirugía, especialista en Estomatología, y experto en Medicina Dental del Sueño, José Luis Díaz, quien apunta que a día de hoy, el único tratamiento que existe a través de la Seguridad Social o de compañías de seguros es una máquina, denominada CPAP, para que la persona que padece apnea del sueño pueda respirar bien mientras duerme.

José Luis Díaz afirma que este problema afecta tanto a niños como a adultos y tiene una prevalencia alta: un 5% en menores y un 25% en adultos, "y la gran mayoría no están diagnosticados; por tanto, no están tratados". Asegura que es muy importante tratarse esta dolencia "porque es un problema de salud muy serio".

Explica que los síntomas más importantes en los menores durante la noche son enuresis (hacerse pipí en la cama), rechinar los dientes, dormir con el cuello hiperextendido para buscar aire y sudar mucho; además, durante el día tienen un bajo rendimiento escolar, mal comportamiento que se etiqueta como hiperactividad y tienen una talla por debajo de la que le corresponde por edad.

El diagnóstico lo hace el pediatra, que deriva al menor al otorrino y al dentista. "Si tiene una hipertrofia en las amígdalas, que es lo más habitual, el otorrino las opera y el dentista valora si hay que hacer una expansión del maxilar", manifiesta José Luis Díaz, quien precisa que "así recupera la vía aérea, la estatura y mejora el rendimiento escolar y el comportamiento".

En los adultos, puede diagnosticarlo el médico de familia y tiene un tratamiento multidisciplinar, en el que intervienen el neumólogo, otorrino, neurofisiólogo, endocrino y dentista, entre otros.

El papel del dentista

Pero, ¿qué papel juega aquí el dentista? José Luis Díaz destaca que existe una nueva especialidad de Experto en Medicina Dental del Sueño, para la que hay que realizar una formación y pasar un examen de la Federación Española de Medicina del Sueño (FESMES), "y una vez obtenida la acreditación, estamos capacitados para ayudar en el diagnóstico de este padecimiento".

Explica que cuando el paciente acude al dentista, se le pregunta al acompañante si éste ronca, si hace paradas respiratorias durante el sueño y si se levanta por las noches para orinar. "En caso afirmativo, sospechamos que el paciente puede padecer apnea del sueño", expresa este profesional, que detalla que para la confirmación del diagnóstico utilizan la polisomnografía o la poligrafía respiratoria, "que consiste en un estudio durante el sueño de las apneas, hipoapneas y desaturaciones de oxígeno que sufre el paciente".

En la clínica Dental Díaz López, que dirige José Luis Díaz junto a la doctora Encarnación López Pelayo, tienen una Unidad de Diagnóstico de Apnea e Hipoapnea que empezó a funcionar hace tres años. Cuenta con tres expertos en Medicina Dental del Sueño, además de un anestesiólogo, un neurofisiólogo, un otorrino y un neumólogo. El centro dispone de un equipo para realizar la polisomnografía y la poligrafía respiratoria "y hemos sido entrenados para preparar al paciente para el estudio nocturno, que consiste en que el paciente duerme en su casa con una serie de electrodos puestos y a la mañana siguiente, los retiramos y sacamos una tarjeta de memoria que ha grabado durante toda la noche las apneas, hipoapneas, desaturaciones y despertares. El neurofisiólogo es el que interpreta e informa del resultado del estudio".

Cuando ya está realizado el informe, la apnea se clasifica en leve, moderada o severa. "En aquellos casos que son leves o moderados, pasamos a la siguiente etapa del diagnóstico, que consiste en hacer una somnoscopia con sueño inducido en la propia clínica". Aquí interviene un anestesista experto que se ha formado expresamente para la sedación de esta prueba, un otorrino, que es quien va a explorar la vía aérea del paciente mientras está dormido, y el dentista, "que una vez que el paciente hace apnea, procedemos a un avance mandibular para verificar si se produce la apertura de la vía aérea", argumenta Díaz, quien señala que esto lo hacen con un dispositivo llamado DSG, diseñado por un grupo de ingeniería de Jerez. Añade que en ese avance, "escaneamos la posición de la mandíbula para fabricar un dispositivo específico para cada paciente, que evita que se desplace la mandíbula mientras la persona duerme y se mantiene así abierta la vía aérea". Este dispositivo se conoce como DAM (dispositivo de avance mandibular).

José Luis Díaz sostiene que "para conseguir un porcentaje de éxito muy alto, desde nuestro punto de vista, es absolutamente imprescindible proceder de esta manera".

Homologación por parte de la Consejería de Salud

La Clínica Dental Díaz López ha obtenido por parte de la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía la homologación para hacer estas pruebas, después de verificarse minuciosamente que cuenta con todas las medidas de seguridad. Se trata de la primera clínica dental de Andalucía en obtenerla y de las pocas de España. Hay que decir que estas pruebas sí se realizan a nivel hospitalario.

Actualmente, esta clínica está probando un nuevo dispositivo para hacer poligrafías respiratorias que evita al paciente la incomodidad de tener que dormir con los cables y cánulas nasales que son necesarios para hacer la polisomnografía. Este dispositivo ha sido creado por un grupo de investigación liderado por la profesora Esther Rodríguez Villegas, catedrática de Física Electrónica en Londres, que es gaditana de Sanlúcar de Barrameda. El dispositivo ya está homologado, tiene dos premios internacionales y está en fase de rodaje por parte de esta clínica dental.