La Promotora San Miguel, responsable de las obras en el solar de Adolfo de Castro donde se produjo un derrumbe el pasado jueves que obligó a desalojar seis inmuebles, comenzó a las nueve de la mañana de ayer con la demolición controlada de la zona que quedó en precario. Asimismo, se el Ayuntamiento, junto con Policía Local y Bomberos, coordinó una operación para que los vecinos afectados de Adolfo de Castro,16 pudieran ir sacando sus enseres y que hoy sábado, en función de la evolución de las labores de derribo, puedan acceder a sus viviendas para hacer lo propio el resto de fincas (Adolfo de Castro 25 y 27 y Bendición de Dios 11 y 13). Así pues sólo quedarían los residentes en Adolfo de Castro, 22, que es la finca afectada por el derrumbe. El horario de hoy para la recogida de enseres será de 10 a 13 y de 16 a 19 horas. El tráfico rodado y peatonal continúa cortado en la zona y con vigilancia de la Policía Local.

Desde los Servicios Sociales, se han atendido a 46 personas para informarles y darles la orientación y valoración de la situación, especialmente se les ha informado sobre las posibilidades para el alojamiento. A 26 de estas personas se las ha derivado por parte de Servicios Sociales a la Clínica de San Rafael y el resto se han alojado con sus familiares.

Por otra parte, la Junta de Gobierno Local conoció ayer el informe de los técnicos municipales sobre lo ocurrido en las obras de la empresa San Miguel Promotres, que tiene licencia de marzo de 2009. José Blás Fernández recordó que a la promotora se le dieron 24 horas para comunicar a Urbanismo cómo iba a realojar a los 46 vecinos afectados, de los que 17 pernoctaron en la clínica de San Rafael y el resto en casas de familiares y amigos. Ayer se sumaron otras nueve personas a las dependencias de San Rafael.

No volverán a su viviendas hasta que el regreso sea seguro y que todos los técnicos den su visto bueno.

El concejal del equipo de Gobierno municipal destacó la importancia al respecto de las Inspecciones Técnicas y los requerimientos de obras de seguridad que lleva a cabo el Ayuntamiento par evitar situaciones similares, afortunadamente en este caso sin daños personales gracias a la rápida actuación del encargado de la obra, que dio la orden de abandonar el solar antes de que el muro se desprendiera.