El flamenco de Cádiz está de luto. Este domingo ha muerto uno de sus personajes más reconocibles, siempre tocado por un sombrero y siempre con lunares en el pañuelo que anudaba al cuello o asomaba por el bolsillo de la chaqueta. Servando Domínguez Carrión, Chiquito de Cádiz, se ha marchado con 92 años de edad, innumerables noches de cantes y actuaciones y la siempre recordada anécdota del día que llamo Sofía Loren a la Reina Sofía.

Nacido en el año 1931, Chiquito de Cádiz comenzó su carrera con los Chavalillos de España con apenas 11 o 12 años. Ha vivido en la provincia gaditana, en Barcelona o en Sevilla, antes de regresar a su Cádiz natal como "policía municipal de los que hacían la ronda en bicicleta", según él mismo contaba. Fue también camarero en la Venta de La Perla, en El Puerto, y en El Burlaero, o estuvo embarcado en la compañía Trasantlántica.

El reconocimiento a su trayectoria se ha evidenciado estos años con varios homenajes que le han tributado a este cantaor, como el que la Cátedra de Flamencología le rindió el pasado año o el de la colocación de una placa con su nombre en la casa donde nació, en la calle San Juan Bautista de la Salle.

El Ayuntamiento de Cádiz ha expresado este domingo sus condolencias por la pérdida de este gaditano de 92 años "de estilo inconfundible y también una persona conocida y muy querida por sus vecinos y vecinas", según ha expresado el alcalde, José María González, que ha lamentado la pérdida "de una de las figuras más icónicas del cante de Cádiz".