Dicho y hecho. La semana pasada, la Junta de Andalucía y el puerto de Cádiz convocaban a los medios para dar a conocer el reinicio de la obra del nuevo tramo del carril bici que discurrirá por suelo portuario. Allí estuvieron presentes Ana Mestre, como delegada del Gobierno de la Junta, Mercedes Colombo, como delegada de Cultura, y la presidenta del puerto de Cádiz y ex alcaldesa de la ciudad, Teófila Martínez.

En esa puesta de largo de esta obra que dio ya comienzo mucho antes de la llegada del Estado de Alarma por culpa del coronavirus se unía la noticia de que el proyecto de este carril bici incluye la apertura de cinco nuevos accesos, con los consiguientes derribos, que dejarán tras de sí una reja más permeable que permita que los ciclistas accedan al nuevo trazado o puedan salir de él en el momento que lo necesiten.

Una ciclista con su mascarilla pasa por delante del nuevo acceso al carril bici del Muelle

Este nuevo acceso que ya hoy dejaba una imagen singular del puerto de Cádiz se ha establecido a pocos metros de la histórica Puerta del Mar, justo frente a un paso de peatones. Se da la circunstancia de que este mismo acceso se cubre y se descubre en eventos tales como los conciertos de verano en el puerto de Cádiz.

A este respecto, el trazado del carril bici que discurre sobre suelo de dominio portuario va a conllevar el derribo de cerca de 60 metros de la reja del Muelle, ya que la obra incluye la apertura de cinco nuevos accesos para la entrada y salida de los usuarios de este nuevo trazado.

La medida de estas nuevas entradas al carril bici irán desde los 13,20 metros a los 16,71 metros.

Gracias a este nuevo trazado, el ciclista circulará en un carril que discurrirá entre la verja del Muelle un nuevo vallado blanco, de 2,40 metros de altura que proporcionará un alto grado de seguridad con un discreto impacto visual compatible con sistemas de detección y cámaras de vigilancia para el recinto fiscal y aduanero de la dársena comercial del puerto de Cádiz.