Frutos Secos Pecino seguirá siendo Frutos Secos Pecino. Así lo han decidido Pablo Villar y Sara Guerrero, sus nuevos propietarios, tras la jubilación de Manuel Pecino, que dejó el negocio el pasado 31 de agosto. Al día siguiente esta joven pareja de emprendedores (él es el dueño del estanco Las Flores) decidió seguir con el puesto tal y como estaba, incluido su nombre, para mantener su esencia.

"Vamos a seguir con el mismo nombre, la misma calidad, la misma forma de vender, los mismos productos, los mismos proveedores, incluso freiremos con el mismo aceite de oliva para que los clientes no noten ninguna diferencia... Va a seguir todo igual pero iremos incluyendo mejoras y modernizando poco a poco el puesto", explica Sara.

Pablo afirma que su intención era ampliar el estanco, pero "viendo la actividad y la clientela, optamos por seguir con el negocio". En este proceso han contado con la mano tendida de Manuel Pecino, que les ha guiado y aconsejado para que el cambio no fuera brusco. "Él se pasa, siempre está por aquí y está pendiente de que nos vaya bien. Su ayuda ahora mismo es primordial porque estamos empezando", comenta Sara.

Aunque lleva poco menos de un mes funcionando, ambos tienen varios proyectos en la cabeza para mejorar el negocio. "Haremos cambios en la gestión, de estocaje, haremos algo de marketing, de mobiliario, en la atención al cliente...", mantiene Pablo. Entre esos proyectos se incluye etiquetar los productos en inglés, dedicar una zona gourmet con productos típicos de Cádiz, introducir nuevos productos como fruta deshidratada, golosinas para veganos, sin gluten... "Lo más importante para nosotros es que el puesto no pierda su esencia y mejorarlo en la medida en que podamos".

Uno de los proyectos de los nuevos propietarios es dedicar una zona gourmet a los productos típicos de Cádiz

Ponerse al frente de un negocio por el que han pasado generaciones de gaditanos no parece una tarea fácil, pero ambos la afrontan con ilusión. "Aquí el público es especial, la gente de 'Cádi Cádi' es única. Tienes que saber poner a cada persona en su lugar", cuenta Pablo. "Si mimas al cliente, te dan ese cariño multiplicado por diez. Yo solo tengo buenas palabras para mis clientes, si estoy aquí es gracias a ellos", subraya Pablo. "Nos hemos hecho al producto y el trato de la gente es muy favorable. Le hemos puesto mucho cariño, esfuerzo y trabajo", añade Sara. 

Frutos Secos Pecino cuenta con dos empleados, aunque para campañas como Tosantos o Navidad ya piensan en reforzar la plantilla.