La amenaza de una huelga a partir del día 18 del presente mes por parte de los trabajadores de Sufi Cointer, la concesionaria del servicio de limpieza y recogida de residuos sólidos urbanos, si no se solucionan los problemas que vienen sufriendo desde hace meses en el cobro de sus nóminas ha salpicado de manera indirecta al Ayuntamiento. Según los trabajadores, el retraso en el pago de las certificaciones por parte del municipio a la empresa ha provocado que este pasado mes sólo hayan cobrado el 75% de la nómina y que en los meses anteriores se haya retrasado el pago de los sueldos.

El Ayuntamiento de Cádiz ha reconocido que se está pagando con un retraso de ocho meses aproximadamente, pero cree que ese no es motivo para que se estén produciendo estas anomalías. En este sentido, el teniente de alcaldesa de Hacienda del Ayuntamiento, José Blas Fernández, afirmó que los propios directivos de Sufi Cointer en Cádiz le reconocen que el de Cádiz "es de los mejores ayuntamientos que paga en España" en comparación con aquellas ciudades en las que tienen las concesiones municipales.

No obstante, señaló que a principios de mes se le ha pagado a esta empresa 1,2 millones de euros y que, según lo que aparece en el contrato de adjudicación, cuando se producen retrasos la empresa tiene derecho a cobrar intereses de demora, algo que cumple el Consistorio gaditano.

Uno de los aspectos que resaltó ayer el equipo de gobierno es que uno de los asuntos que se valora a las hora de proceder a una concesión municipal de este tipo es que las empresas tengan la suficiente solvencia para poder afrontar semejantes situaciones.

Asimismo, el propio José Blas Fernández recordó que además de hacer frente a los pagos actuales del contrato, que asciende a unos 14 millones de euros anuales, se afronta una operación de factoring por la que el ayuntamiento paga a una entidad bancaria la deuda que todavía estaba pendiente con Focsa, una antigua adjudicataria, "por el débito que el equipo de Gobierno socialista dejó en aquel entonces con esta compañía".

Fernández recordó que el retraso de los pagos a las empresas proveedoras se encuentra por debajo de la media española en los ayuntamientos y recordó que este mes se han pagado por este concepto 8,7 millones de euros.

Los trabajadores de Sufi Cointer acordaron en la noche del lunes en asamblea solicitar una reunión con la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, para explicarle la situación. Los empleados consideran que la empresa le echa las culpas al Ayuntamiento por no pagarle, "por lo que nos preguntamos quién dice la verdad".

De momento sólo han amenazado con la huelga a partir del próximo 18 de octubre. Antes tienen prevista una asamblea para el próximo miércoles en la que decidirán los pasos que van a dar.