El Ayuntamiento de Cádiz ha retirado a primera hora de esta mañana, casi con nocturnidad, sin comunicacion previa y con una agilidad que ya necesitarían otras obras municipales, el busto del rey Juan Carlos I, ubicado en la glorieta de San Severiano.

Los vecinos de la zona, que alertaron de estos trabajos, se vieron sorprendidos por una operación ejecutada aprovechando las fiestas de Navidad y Reyes, por lo que la presencia de personas por la vía era mínima. 

Momento de la retirada del busto del Rey emérito.

Los operarios montaron un pequeño andamio para acceder con mayor facilidad al busto que, afirman los vecinos, se pudo separar con facilidad de la columna en la que situó en su día. Después se guardó en un cajón y se trasladó a dependencias municipales fuera de la visión del público. Hace unas semanas se realizó una operación similar con otro busto de José María Pemán.

La imagen del Rey emérito presidía el inicio de la avenida del soterramiento, a la que se le dio su nombre durante el gobierno del PP. Este título también ha sido retirado por el gobierno de José María González sustituyéndolo por el de Avenida de la Sanidad Pública, lo que a su vez ha provocado las quejas por parte de los sanitarios que trabajan en el sector privado.

El gobierno de Kichi justificó la eliminación del nombre de Juan Carlos I afirmando que "la huida del rey emérito de España a otro país pone de manifiesto, una vez más, la extrema fragilidad de la institución monárquica". Medida que el alcalde calificaba como "fetén".

Esta decisión del gobierno local fue considerada por sectores de la ciudad como "puramente revanchista", criticando que se adoptasen medidas tan radicales sin un juicio previo, sino por una mera cuestión ideológica.

El busto había sufrido hace semanas ataques vandálicos.