El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) es la principal herramienta de recaudación de la que disponen los ayuntamientos para poder financiar los servicios que ofrecen a la ciudadanía. En los momentos del boom del ladrillo, muchas ciudades aumentaron sus ingresos de una forma exponencial en paralelo a su expansión. Sin embargo, una localidad como Cádiz, sin apenas suelo para crecer, no puede disponer de esta herramienta para aumentar sus recursos, por lo que cada euro que entra en la caja municipal está perfectamente medido.

El Ayuntamiento de Cádiz ha publicado en su portal de Datos Abiertos la relación de bienes inmuebles que están exentos de pagar el IBI en función de lo que marcan las leyes. Así, en el ejercicio de 2022, el Consistorio gaditano ha dejado de recaudar 3.109.178,95 euros.

Esta cantidad resulta de la suma de un total de 1.006 recibos que no puede cobrar el Consistorio gaditano en función de lo que marca la ley a nivel nacional y su propia Ordenanza del Impuesto de Bienes Inmuebles, dentro de las Ordenanzas Fiscales de 2022. El valor catastral de todos estos bienes alcanza los 454.137.813,70 euros.

Para tener una idea de lo que supone este dato, la previsión de ingresos por IBI urbano que se incluye en los presupuestos municipales de 2022 es de 39 millones de euros, mientras que el rústico es de 5.700 euros y el de carácter especial es de 700.000 euros.

Por categorías, uno de los datos más llamativos por desconocido, a la par que polémico, es el dinero que deja de recaudar el Ayuntamiento de Cádiz en virtud de la exención por ley de bienes de la Iglesia Católica y asociaciones confesionales no católicas en función de lo que se recoge en el Acuerdo entre el Estado Español y la Santa Sede sobre Asuntos Económicos, de 3 de enero de 1979, y con las asociaciones confesionales. Bajo este epígrafe constan un total de 109 inmuebles, sumando una exención de 348.971,39 euros, a partir de una base imponible de 47.158.295,57 euros.

Este no es el único apartado relacionado con la Iglesia, ya que en otro se recogen los colegios concertados, aunque en este caso existe una compensación al municipio por parte de la Administración educativa. A esta exención se suman 25 inmuebles que tienen un valor catastral total de 58.418.171,98 euros, por lo que las cuotas bonificadas ascienden a 432.294,47 euros.

Si se suman los dos epígrafes, los bienes de la Iglesia y el resto de confesiones tienen un valor catastral total de 105,5 millones de euros, por lo que el Ayuntamiento de Cádiz deja de recibir 781.265,86 euros.

Cabe recordar que tanto Ganar Cádiz en Común, integrante del equipo de Gobierno de Adelante Cádiz, como la asociación Europa Laica, habían solicitado al Ayuntamiento de Cádiz la publicación del listado de bienes inmuebles de la Iglesia Católica que estaban exentos de pagar el IBI, una petición a la que se ha dado cumplimiento en función de lo que permite la ley.

En cuanto al resto de administraciones e instituciones que cuentan con bonificaciones del IBI, el epígrafe que engloba una mayor cantidad de exenciones es el de los bienes del Estado, las comunidades autónomas y entidades locales afectos a seguridad ciudadana, defensa, educación y penitenciarios. Bajo este tipo de bonificación se circunscriben 79 bienes con una base imponible total de 163.924.491,63 euros, por lo que las cuotas bonificadas ascienden a 1.213.041,24 euros.

Por su parte, la Universidad de Cádiz cuenta con 13 bienes inmuebles de un gran valor catastral, que alcanza los 56.197.547,80 euros, por lo que se ahorra 415.861,85 euros al año. Por su parte, las instalaciones ferroviarias dejan de abonar 218.838,64 euros al año, mientras que las entidades sin ánimo de lucro cuentan con una bonificación del IBI por un montante de 169.544,96 euros anuales.