Arropada por los suyos, casi sin poder hablar, haciendo un visible esfuerzo ante la prensa para contener la emoción y con lágrimas en los ojos, la presidenta del Partido Popular de San Fernando, primera teniente de alcalde y delegada general del área de Urbanismo, María del Carmen Pedemonte, anunció ayer su retirada de la política municipal para dedicarse en exclusiva a su labor como diputada autonómica en el Parlamento andaluz, tal y como desde hace un año le pide la dirección regional del partido.

Pedemonte ni será candidata en las elecciones municipales de 2011 ni continuará en el Ayuntamiento más tiempo del necesario para reorganizar el grupo y las delegaciones que están bajo su área de responsabilidad en el Gobierno compartido con los andalucistas.

Ayer lo corroboró el presidente provincial del PP, José Loaiza: "Las encuestas nos dan la victoria en Andalucía y, en los dos años que quedan para las elecciones (autonómicas), necesitamos a todos nuestros diputados autonómicos al cien por cien y con dedicación exclusiva en el Parlamento andaluz", explicó.

Esta petición no es nueva. Hace ya un año que la dirección regional y provincial del partido quisieron que Pedemonte abandonara la política municipal para dededicarse por entero al Parlamento andaluz, tal y como habían hecho otros diputados autonómicos. Pedemonte pidió entonces tiempo.

Poco después, la noticia del desfalco millonario perpetrado en la Caja municipal y el desarrollo de las oportunas investigaciones, así como el impacto que tuvo en la política municipal -que hizo que el pacto de gobierno con el PA pasara por su momento más delicado- desaconsejaron su marcha, que quedó postergada a una circunstancia política más oportuna.

Pedemonte, no obstante, fue liberándose poco a poco de sus responsabilidades y descargándose de trabajo. En las pasadas navidades dejó la portavocía del grupo, que asumió el concejal Daniel Nieto Vázquez. Y ayer anunció su marcha. "Hace un año que me lo pidieron, pero ha llegado el momento de adoptar la decisión", dijo ayer.

Eso sí, su marcha no será todavía inmediata. Pedemonte, con el beneplácito de su partido, dispondrá de un plazo prudencial para reorganizar el grupo municipal y las delegaciones que gobierna, para rematar algunos temas pendientes en el Gobierno local.

Sobre la figura de su sucesor nada ha trascendido todavía. Loaiza, ayer, eludió hablar del candidato isleño a las municipales de 2011. "Será una decisión de los comités electorales local, provincial y regional que se adoptará en el momento oportuno", apuntó.

Tampoco se resolvió quién podría pasar a ocupar la primera tenencia de alcaldía en el Gobierno compartido con la formación nacionalista y con Manuel de Bernardo como alcalde.

Pedemonte, que seguirá como presidenta local de la formación, no ocultó que había sido una decisión dolorosa y complicada al estar muy apegada a su equipo de trabajo y a la política municipal. "Me dolía mucho dejarlo, pero trabajar en el Parlamento es también un reto interesantísimo y en el PP tenemos muy claro que no nos agarramos a un sillón", dijo.