El hermano mayor de Medinaceli, Benito Fernández, no esconde la satisfacción que les produce la comunicación trasladada por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias para que un interno de Puerto III participe en la procesión del Jueves Santo. “Es nuestro deber, estamos convencidos de ello”, asegura Fernández, que no en vano puntualiza que su hermandad rinde culto “a Jesús Cautivo y Rescatado, así que nos debemos a ellos”.

La cofradía viene colaborando desde hace meses con la tercera prisión de El Puerto de Santa María, cuyas misas ya se celebran ante una imagen de gran tamaño de Jesús de Medinaceli a petición de los propios presos. La pasada Navidad también tuvieron ocasión de estrechar lazos con ese belén que los internos realizaron y que estuvo expuesto en la parroquia de Santa Cruz. Y además de la colaboración periódica que mantienen, en la actualidad se trabaja en futuros proyectos que implicarán aún más a la cofradía de Medinaceli en la atención a los presos.

Y es que Benito Fernández destaca la buena sintonía con la dirección de la prisión y las facilidades que se vienen dando por parte de las instituciones para que Jesús de Medinaceli sea el Señor de los cautivos.