La disponibilidad de las antiguas instalaciones del Museo Municipal para acoger la Alcaldía y el servicio de Atención al Ciudadano, entre otros, se ha hecho de rogar, inmersas en cuestiones administrativas en torno a las obras de acondicionamiento que la finca de Real, 63 requería para adaptarse a la normativa sobre dependencias públicas y para contar con los sistemas necesarios para cubrir sus nuevas funciones. Desde hace unas semanas, de cualquier modo, las prestaciones existentes en Isaac Peral se han mudado, y los resultados satisfacen al Gobierno municipal, que asegura que aún cuando los grupos municipales hayan rechazado hacer uso de los despachos previstos en este espacio los mantendrán para cumplir la ley.

En el mandato anterior los grupos municipales fueron trasladados a la Casa de la Cultura, una decisión que no gustó a ninguno de los partidos de la oposición que presentaron sus quejas y reclamaron volver al edificio donde estaba Alcaldía y por ende la actividad más cercana al ciudadano. En esas oficinas era donde estaban mejor ubicados para atender las reclamaciones de los isleños, alegaron. Por eso, y a pesar de habilitarse espacios en las dependencias de la calle Gravina, ninguno los usó en ese tiempo, ni tampoco durante lo que se lleva del mandato actual. Ahora, tampoco tienen intención de utilizar las oficinas que se han creado en la nueva sede de Alcaldía. PP, C's y Podemos prefieren seguir usando sus sedes, todas en Real. Entre sus argumentos está el rechazo al nuevo uso que se ha dado del edificio, convencidos de que era innecesaria esta mudanza dado que el Ayuntamiento está en obras después de años de espera. El coste de la actuación también se ha criticado desde que el equipo de gobierno tormara la decisión. Para Sí se puede, según su portavoz, Ernesto Díaz, su postura es, además, una señal de protesta por "el malgasto del dinero de las arcas públicas en cosas innecesarias".

A pesar de ello, el gobierno municipal mantendrá estas salas disponibles para los grupos municipales. De hecho, adelantó la alcaldesa, Patricia Cavada, remitirán cartas a todos para informarles de que las oficinas están abiertas y de que pronto se producirá el traslado del mobiliario que está en los despachos de la Casa de la Cultura: un escritorio y las estanterías. "El principal objetivo era dar un mejor servicio a los ciudadanos con estas nuevas dependencias. Además, de esta forma cumplimos con la legislación en cuanto a los grupos municipales. Evitamos que haya falta de transparencia y de participación al dejarlos lejos de la actividad de Alcaldía, donde los servicios generales, Atención al Ciudadano o el registro general", defiende la regidora que hace referencia a varios de los argumentos que en su momento esgrimieron PSOE, Ciudadanos e IU cuando alegaron para que no se produjera el cambio de lugar. El Reglamento Orgánico de Funcionamiento del Ayuntamiento establece, recuerda la socialista, que "los grupos políticos de la Corporación dispondrán cada uno de ellos en la sede de la misma de un despacho o local para reunirse de manera independiente y recibir visitas de los ciudadanos". El acuerdo cuando cerró el Ayuntamiento para la rehabilitación fue tácito para mudarse con Alcaldía a Isaac Peral.

Para seguir ese criterio, que esgrimieron entonces en la oposición, ahora en el gobierno local llevan a Real, 63 los despachos de los grupos municipales. "Se mantendrán a su disposición para que puedan consultar los expedientes de plenos o comisiones con comodidad y para que puedan consultar a los concejales o a la secretaria general", insiste Cavada que vuelve a presentar otros de los puntos que esgrimieron cuando los trasladaron a la Casa de la Cultura. Tanto socialistas como andalucistas confirman que harán uso de estas oficinas: allí se irán en breve para estar a disposición de los ciudadanos o para cualquier cuestión administrativa.

La regidora se muestra convencida de este cambio al antiguo Museo y apunta que en estas semanas ya en funcionamiento los sondeos hechos al personal y a los ciudadanos son positivos: "La mejora ha sido sustancial, porque se puede prestar un mejor servicio, por la accesibilidad, con el sistema electrónico de las mesas adecuado".

Otra razón que expone la alcaldesa es que con el cambio al antiguo Museo los funcionarios de Cultura que están provisionalmente trabajando en el centro de congresos podrán ocupar las estancias de la Casa de la Cultura, donde tiene despacho el concejal y está el resto de personal de esta área. Irán ellos, la fonoteca y toda la documentación que ahora misma se encuentra en otros sitios.