Un Consejo de Participación Ciudadana debatirá el incierto futuro del CEFOT-2

El movimiento vecinal reclama una mayor contundencia para impedir el cierre del Centro de Formación de Tropa número dos (CEFOT-2) del acuartelamiento de Camposoto. Desde la directiva de la federación de asociaciones de vecinos Isla de León -el movimiento asociativo más representativo de San Fernando- se considera que ha llegado el momento de pasar de las palabras a los hechos en vista de que las declaraciones institucionales y muestras de rechazo ante la posible desaparición de esta unidad militar no han tenido los resultados esperados. Entiende que es necesario puesto que el futuro del centro -a día de hoy- es todavía más incierto toda vez que el Gobierno central ha confirmado que no tiene previsto cerrar las instalaciones de Cáceres, lo que reduce aún más el abanico de posibilidades de supervivencia de Camposoto.

Por ello, explicó ayer el presidente del colectivo, Antonio Romero, hace tres semanas solicitaron la convocatoria de una reunión del Consejo Local de Participación Ciudadana con un único punto en el orden del día: el futuro del CEFOT-2 y la adopción medidas para impedir su cierre. La federación vecinal espera convertir a este órgano de participación ciudadana en el instrumento desde el que desarrollar una acción organizada con el Ayuntamiento y desde el que aglutinar ese frente político y social común que demanda la lucha por estas instalaciones militares.

De hecho, como apuntó Romero, hay precedentes que demuestran lo valioso que puede llegar a ser el Consejo de Participación para canalizar estas movilizaciones, como ocurrió por ejemplo con las protestas ciudadanas que se llevaron a cabo para impedir el cierre de Bazán hace ahora una década. De lo que se trata -reiteró- es de impedir que desaparezca otra instalación militar más de San Fernando, una ciudad que históricamente ha basado su economía en su dependencia de las Fuerzas Armadas y que todavía no se ha recuperado de lo que ha supuesto la desaparición del servicio militar obligatorio, la escuela de artillería de Janer o la escuela de aplicaciones de la Infantería de Marina, entre otras unidades. Sobre todo, en un momento especialmente complicado como el actual y teniendo en cuenta que el cierre no acarrearía ninguna ventaja para la ciudad ni le permitiría recuperar los terrenos de Camposoto.

La federación de asociaciones de vecinos ha convocado ya un consejo vecinal en el que aprobó posicionarse en contra del cierre del CEFOT. También ha remitido cartas al presidente del Gobierno y al ministro de Defensa pidiéndoles que dé marcha atrás con estos planes dado el perjuicio que acarrearían a la ciudad. Por eso, sobre todo, tras conocer que Cáceres se mantendrá abierto, considera que ha llegado el momento de dar un paso más y plantearse movilizaciones.

El delegado de Presidencia y Ciudadanía, Daniel Nieto, confirmó ayer que esta reunión del Consejo de Participación Ciudadana solicitada por la federación -la tercera que se produce en el mandato- se llevará a cabo a lo largo de la próxima semana y en ella se debatirá sobre posibles medidas a adoptar desde la ciudad para impedir el cierre del centro de formación del Ejército de Tierra.

Al mismo tiempo, el colectivo de los taxistas, profesionales a los que la marcha del CEFOT-2 les afecta de lleno, ha anunciado la convocatoria de una protesta para el próximo día 20 en la que una caravana formada por la flota al completo de vehículos de los que dispone este servicio en la ciudad -68- recorrerá La Isla desde las proximidades del acuartelamiento de Camposoto hasta la plaza del Rey, para mostrar su rechazo a la desaparición de estas instalaciones. La protesta, explicó ayer el presponsable de la Asociación Local de Taxistas, Francisco Javier González Prián, está pendiente de autorización por parte de la Subdelegación del Gobierno.