Antes de empezar ha sido necesario acondicionar las instalaciones del antiguo colegio Padre Franco como depósito -con medidas contraincendios, deshumidificadores y reguladores de temperatura para controlar debidamente las condiciones ambientales- y acabar las obras del Castillo de San Romualdo y conseguir las debidas autorizaciones de la Delegación Territorial de Cultura.

Hace meses, prácticamente desde comienzos del mandato, que se habla del traslado del Museo Histórico Municipal, un compromiso electoral adquirido por las dos formaciones que integran el gobierno local, PSOE y PA. Hasta esta semana, sin embargo, no han empezado a salir las primeras piezas del edificio de la calle Real. Y hasta ayer además no fue claramente visible esta mundanza, adjudicada el pasado mes de marzo a una empresa especializada en la materia, Cañadas Arte y Exposiciones SLU, por 47.491,29 euros.

Operarios de la adjudicataria empezaron ya a trasladar los cuantiosos fondos del Museo -todo el material que no se encuentra expuesto al público- hasta su nuevo destino, el depósito habilitado en el antiguo colegio Padre Franco, tras proteger y embalar debidamente todo el material, un trabajo que supervisó personalmente el concejal de Cultura, Juanjo Carrera.

Es la primera fase del traslado, que se espera que a finales de la semana esté ya bastante avanzada. El nuevo depósito abarca en conjunto una superficie de 203,51 metros cuadrados que se reparten en tres salas diferentes (de 59, 44 y 100 metros cuadrados). Los trabajos de adaptación de estas instalaciones municipales han requerido una inversión de casi 27.000 euros.

El siguiente paso será el movimiento de todo el contenido expositivo, que será reubicado en el Castillo de San Romualdo una vez que han concluido también las últimas obras que se han llevado a cabo en este histórico inmueble y que garantizan su apertura y uso público al contar por fin con agua, suministro eléctrico, medidas contraincendios, climatización, aseos...

Una vez allí, los técnicos municipales empezarán a trabajar en la reordenación de todo el contenido según el proyecto elaborado por el subdirector del Museo, Antonio Sáez, que a finales de la semana pasada la alcaldesa mostró también a los agentes culturales. En este nuevo diseño el Museo se reinventa para mostrar sus contenidos alrededor del patio central del Castillo, donde contará con casi el doble de metros cuadrados de exposición. La mudanza permitirá además la incorporación de algunas novedades, entre las que se incluye un espacio monográfico para las excavaciones arqueológicas que se llevaron a cabo en el propio Castillo al hilo de la intervención y otro reservado a exposiciones temporales.