Pese a que la dirección de Airbus España es cada vez más clara y no esconde que la decisión está tomada pese a la negativa de los trabajadores, la plantilla de Airbus Puerto Real se resiste a darse por vencida y mantienen las movilizaciones para evitar el desmantelamiento de la factoría de El Trocadero y el traslado de la producción y la plantilla al CBC de El Puerto.

Este miércoles, la plantilla se ha encerrado en el interior de la fábrica. Ha sido un encierro de poco más de cinco horas, similar al que han realizado en otras ocasiones, con el que lanzaron un mensaje a la empresa de que no están dispuestos a abandonar su centro de trabajo. El encierro se produjo en la nave 3 de la planta, que ahora está totalmente vacía, y que hasta hace poco tiempo albergaba la construcción de las piezas para el suberjumbo A380, que llevó a la planta puertorrealeña a lo más alto y se convirtió en su talón de Aquiles una vez que el programa se suspendió.

Esta protesta es la última que se incluía en el calendario de movilizaciones aprobado por el comité de empresa de Puerto Real, el noveno desde que arrancaron las acciones a mediados de marzo, y probablemente la última que celebran hasta el mes de septiembre, cuando se retomen a la vuelta de las vacaciones. Para entonces Airbus ya espera estar iniciando el desarrollo del proyecto ‘Pearl’, que materializará el traslado al CBC y la creación de un único polo industrial.

Además de protestar frente a la empresa, la plantilla de trabajadores reclama al Gobierno de la Junta y a sus Grupos Parlamentarios “que se comprometan con la aprobación de las políticas industriales y los recursos que permitan el mantenimiento del tejido aeroespacial y su empleo en la industria auxiliar, así como que la Planta de Airbus Puerto Real siga siendo una ‘Planta de Excelencia en Montajes Aeroespaciales’, dentro del perímetro Airbus para muchos años”.

Insisten a “quien se supone debe estar de lado de los trabajadores para influir y apostar por el mantenimiento del sector aeroespacial en el territorio”, que deben defender sus causas, que son las causas que necesita la industria, la provincia de Cádiz y los trabajadores del sector aeroespacial que lleva desarrollándose en Cádiz desde el año 1927.