Este martes, mas 144.00 alumnos de Secundaria, Bachillerato, Ciclos Formativos, Formación Profesional Básica, Educación Permanente de Adultos y Enseñanzas de Régimen Especial, han arrancado el año académico. Por primera vez, no lo han hecho todos al mismo tiempo, la situación de crisis sanitaria ha hecho que los centros educativos, al igual que ocurrió con la educación Infantil y Primaria, hayan comenzado un regreso a clase escalonado.

Es lo que ha ocurrido en el IES Antonio Muro de Puerto Real, municipio en el que estudian 2.208 alumnos de Secundaria y 511 de Bachillerato. El centro ha abierto sus puertas a las ocho de la mañana y hasta las 13:30 horas estará recibiendo a grupos de alumnos. Un curso cada media hora. Este martes lo han hecho 12 grupos y mañana harán los mismo los diez grupos restantes, hasta completar los 22 que existen en el centro entre Secundaria y Bachillerato.

Una de las aulas de cuarto de Secundaria, en la jornada de presentación

Si el inicio del curso es complicado, este año se hace con la dificultad añadida de distribuir todos los espacios del centro y conseguir que los alumnos acudan con la suficiente distancia, al menos hasta que aprendan a desenvolverse en los espacios diseñados: zonas aisladas para distintos niveles, aseos diferenciados o patios zonificados, que hay que conocer. También se han repasado junto a los estudiantes, las “normas Covid” del centro.

Para algunos, como ocurre con los alumnos de segundo curso de Bachillerato, es una jornada de presentación y, de algún modo, de despedida, ya que van a conocer al profesorado, a los compañeros y las materias que se van a impartir, y se marcharán a casa a recibir teleformación.

El IES Antonio Muro no ha tenido más remedio que tomar esta decisión debido a la falta de espacios, ya que, tal y como ya vaticinó la Asociación de Madres y Padres del Instituto, el nuevo aulario que la Junta construye en el centro aún no se ha terminado. Ese es el espacio que iba a ocupar el alumnado de primero de Secundaria, que ahora tendrá que iniciar el curso en otras aulas, concretamente en las de Bachillerato

“Eso implica que los alumnos de segundo de Bachillerato deberán comenzar totalmente a distancia. Ya tenemos la experiencia del pasado curso cuando el seguimiento de las clases online fue superior al 90%, aunque esperamos que se cumpla el compromiso de que las obras estén finalizadas en tres semanas, y puedan incorporarse al centro lo antes posible”, explica el director del IES Antonio Muro, Francisco Ortega.

Una vez que estos alumnos se incorporen, alternarán las clases presenciales con un “seguimiento educativo”. Es decir, los alumnos de cuarto de Secundaria y primer y segundo curso de Bachillerato, dividirán cada clase en dos grupos de aproximadamente 15 personas. Así, según el diseño planteado, la mitad acudirá una semana al centro a recibir clases presenciales, mientras que el otro grupo se quedará en casa realizando trabajos y estudiando con un seguimiento por parte del profesorado. No es una teleformación, puesto que los profesores estarán siempre impartiendo clases presenciales a uno de los grupos. Así se ha planteado para todo el año académico.