En pleno debate sobre si es más apropiado reparar un electrodoméstico cuando se estropea o cambiarlo directamente por uno más moderno y eficiente, lo que los consumidores deben tener claro es que no basta únicamente con aprenderse el decálogo definitivo para ayudar a reducir el consumo de energía de los electrodomésticos o ser conscientes de los tres electrodomésticos que más energía consumen a pesar de estar 'apagados'. Ese tipo de información ayuda a que las facturas de la luz no se disparen, en unos tiempos en los que el precio de la energía sigue por las nubes, pero lo realmente importante para poder disfrutar de unos electrodomésticos eficientes durante el tiempo estimado por el fabricante es hacer buen uso y mantenimiento de los mismos. Estos son cinco consejos para conseguir que tus electrodomésticos funcionen a pleno rendimiento el mayor tiempo posible.

La importancia del manual de instrucciones

Lo primero que debemos tener claro es que el manual de instrucciones tiene más importancia de la que la inmensa mayoría de consumidores le otorga. No vale dejarnos llevar por nuestro sentido común para instalar los electrodomésticos, por mucha tecnología e inteligencia artificial que presenten los modelos más modernos. Seguir las especificaciones que presente cada electrodomésticos a nivel de potencia, carga máxima o tiempo de uso es el primer paso para que tenga un funcionamiento óptimo durante muchos años.

Limpieza profunda cada quince días

En segundo lugar hay que ser conscientes de que los electrodomésticos no pueden usarse una y otra vez sin mantenerlos limpios. Es recomendable realizar una limpieza profunda cada 15 días evitando siempre el uso de sustancias que puedan dañar su material, sobre todo cuando tratemos con el horno. Esto no solo mejora su aspecto, sino que también evitará la aparición de averías inesperadas y la necesidad de cambio anticipado.

Inspecciones periódicas

Técnico de frigorífico analizando un electrodoméstico

Independientemente de la limpieza que hagamos y de la garantía de que disponga cada electrodoméstico, también es importante realizar inspecciones periódicas para asegurar el correcto uso en electrodomésticos como lavavajillas, frigoríficos o lavadoras.

La ubicación del frigorífico

Si nos centramos específicamente en el frigorífico, toma especial relevancia su ubicación dentro de la cocina. Siempre es importante instalarlas alejadas de la luz solar o de fuentes de calor muy cercanas, disponiendo de un correcto aislamiento.

Especial atención a la lavadora

Por último, y en este caso centrándonos en la lavadora, para lograr que este electrodoméstico tenga un correcto funcionamiento durante mucho tiempo hay que cuidarla de forma especial, sin cargar al máximo de su capacidad cuando vayamos a ponerla en funcionamiento y dejando la máquina ligeramente abierta entre para prevenir los malos olores y moho al terminar cada lavado.