Jueves Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Jueves Santo y Madrugada en la Semana Santa de Cádiz 2024

Aquí y en Holanda

El dinero público no esde nadie, pero el privadoes público, esto es,de ellos mismos

Qué raro que los mismos que promueven el cambio de sexo, la autodeterminación de las regiones y los géneros fluidos se pongan como hidras porque Rafael del Pino se autoperciba como holandés. El divorcio exprés es progreso, pero ¿la nacionalidad es indisoluble? Puede interrumpirse un embarazo sin permiso paterno, ¿no un hecho impositivo sin permiso gubernamental? En este paraíso de derechos individuales por catálogo, ¿necesito la graciosa concesión de Nadia Calviño para cambiar de domicilio fiscal? ¿Se requiere la bendición de Yolanda Díaz para el patriotismo fetén? La lealtad, ¿la define Sánchez? Tanto europeísmo ¿no era para la libre circulación de capitales, sino para gozar de la capitalidad europea de vez en cuando? Ahora nos predican virtud desde el púlpito laico.

Cuando todo se desmorona, la coherencia es la primera baja. Aquí se les está viendo el plumero. Pasan de todo menos del paso por caja. El dinero público no es de nadie, pero el privado es público.

Por eso lo subversivo es el youtuber que se las pira a Andorra o Rafael Van der Dennenboom, que se ha ido al quinto dennenboom para buscar una sombra y también seguridad jurídica y un entorno menos hostil a la empresa y la creación de riqueza.

El Gobierno, en lugar de enfadarse, tendría que tomárselo en serio. Una de las frases más tristes de nuestra historia, aunque la dijo un personaje venerable, es la de Cánovas del Castillo: "Español es aquel que no puede ser otra cosa". Yo pienso muchísimo más como Primo: "Español es una de las pocas cosas serias que se pueden ser en este mundo"; pero reconozco que el socialismo está consiguiendo hacer cierta la boutade del conservador Cánovas, ay.

La españolía grande y seria es la de la Civilización y América, la de la Cultura y la fe, y a ésa, justamente, no dejan de minusvalorarla. La españolidad resignada que no puede hacer otra cosa es la del IRPF, el IVA, Sucesiones y Sociedades, más la inflación y los insultos si suspiras. Como el poderoso (ya sea ferrovialio o youtuber) puede ("Aquí y en Holanda/ el que paga manda"), se nos hacen andorranos y holandeses.

No me alegro en absoluto. Me preocupo en carne viva. Primero, por egoísmo, porque ni yo ni los míos vamos a poder irnos a Holanda ni siquiera a Bélgica. Luego, patrióticamente, porque aspiro a una España a la queramos pertenecer incluso para pagar impuestos, si éstos son justos, necesarios, transparentes y eficaces.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios