Entre las piezas expuestas en la muestra Atlántida. Sonidos y materias, que inauguró ayer la IX edición del Festival de Música Española, se encuentran algunas de las cartas que intercambiaron Manuel de Falla y José María Sert. Una correspondencia a través de la que intentaron dar forma a una posible producción de la Atlántida y en la que se perciben, también, las preocupaciones plásticas del compositor gaditano. En una de esas cartas, tras la muerte de Sert, Manuel de Falla escribe "ya me quedé solo con la música. Millet (que iba a dirigirla), también se fue".

Manuel de Falla nunca vería el estreno de Atlántida, que finalmente se produjo en 1961 en Barcelona y que, por tanto, celebra este año el medio siglo de su primera representación. La muestra, que desde hoy puede verse en el Museo de Cádiz, recoge los proyectos que durante los años sesenta desarrollaron el arquitecto José María García de Paredes y el pintor y escultor Joaquín Vaquero Turcios para llevar a escena la obra, un montaje inicial que nunca llegaría a representarse.

Así, flanqueada por una enorme partitura y la reproducción a gran escala de las fotografías de Falla "desembarcando" en Sancti Petri, Atlántida. Sonidos y materias reúne cartas, información, láminas y fotografías de García de Paredes -a medio camino entre lo onírico y lo expresionista- y diez de los bocetos firmados por Joaquín Vaquero Turcios.

Acompañada por el comisario de la muestra, José Vallejo; y por Elena García Paredes -de la Fundación Archivo Manuel de Falla-, Yolanda Peinado inauguraba ayer tarde la exposición que abre, a su vez, una nueva cita con la música española. Un encuentro, afirmó la delegada de Cultura de la Junta de Andalucía, que tiene "presente a Manuel de Falla en cada una de sus actividades".

Así, tanto la delegada de Cultura como el director del Festival de Música Española, Reynaldo Fernández Manzano, aseguraron que esta "cita con la música" pretende "conjugar conciertos de calidad junto al fomento y la búsqueda del patrimonio histórico musical y la presencia de nuevos creadores. Tratando de demostrar, además -continuó la responsable- que economía y cultura son binomios compatibles".