El alcalde de San José del Valle, Pedro García (PSOE), reconoció ayer que su partido está sopesando seriamente la posibilidad de renunciar a la Alcaldía de esta localidad tras la reciente ruptura del pacto de gobierno que durante once meses mantuvo vigente, aunque con muchas diferencias internas, con el partido independiente Unión Vallense (UVA).

"Estamos analizando con seriedad la situación, estamos barajando los pros y los contras y, sobre todo, estamos buscando lo mejor para el futuro de nuestro pueblo. La próxima semana decidiré si me voy de la Alcaldía", reflexionaba Pedro García en declaraciones a este medio.

En el caso hipotético de que el regidor presentara su dimisión, habría que convocar un pleno extraordinario en el que se plantearían los candidatos de cada grupo político a la Alcaldía y se votaría en pleno. Tanto el PP como el PSOE presentarían sus candidatos y está por ver qué haría la UVA y cuál sería el sentido de su voto.

La opción de que el PSOE propicie un relevo en la Alcaldía vallense -anunciada el lunes por el ex alcalde socialista Juan García- es considerada sin embargo como una "estrategia" por parte del líder local del PP, el también ex alcalde Antonio García. "No me creo que el PSOE vaya a renunciar a la Alcaldía así como así. Creo que lo que están buscando es una justificación, para luego salir diciendo que van a seguir gobernando porque el pueblo así se lo ha pedido", indica el portavoz del grupo municipal del PP. Antonio García reitera además que hasta la fecha no ha mantenido conversación alguna con la dirección de la UVA para negociar una posible moción de censura.

Lo que sí tiene claro el líder local del PP es que el PSOE "no está legitimado para seguir en la Alcaldía porque sólo tiene tres concejales y la gobernabilidad del pueblo está en claro peligro. Y eso no fue para nada lo que dijeron los ciudadanos en las urnas el año pasado", añadió el que fuera alcalde entre 1999 y 2003.

No piensa igual obviamente el regidor vallense. Pedro García mantiene su mensaje de que se siente capacitado para seguir gobernando el pueblo aunque, eso sí, teme que el PP y la UVA pongan en práctica una pinza desde la oposición que impida la gobernabilidad y desacredite así su gestión al frente del pueblo. El alcalde, que asegura que cobra menos de 1.100 euros líquidos al mes, dice que su partido está preparado tanto para gobernar como para trabajar por El Valle desde la oposición.