El aumento de los contagios por coronavirus que se está produciendo a lo largo del mes de noviembre y la cercanía de la Navidad están provocando que las comunidades autónomas se estén planteando la implantación del pasaporte COVID para restringir el acceso a diferentes espacios a las personas no vacunadas. 

Esta medida parte con el objetivo de limitar las restricciones que se impongan para que baje la tasa de incidencia a las personas que han rechazado recibir las correspondientes dosis, de forma que los que sí se han inoculado la vacuna o han pasado la enfermedad sí puedan disfrutar de los diferentes espacios de ocio. Asimismo, también se pretende dar un empujón definitivo a la campaña de vacunación.

De momento, son tres las comunidades en las que ya ha empezado a implantarse el pasaporte COVID. Estas son Galicia, Baleares y Cataluña, que ya han recibido el visto bueno de sus correspondientes tribunales superiores de justicia para ponerlo en marcha. Es probable que otras regiones, entre ellas Andalucía, tomen el mismo camino en los próximos días. 

Una vez que la Junta de Andalucía tome esta decisión, ¿cómo va a afectar esto al día a día de los gaditanos? Pues en la actualidad no existen una directrices únicas en todo el país, por lo que cada comunidad autónoma esta tomando su propia determinación para exigir el pasaporte COVID, aunque todas se centran específicamente en un ámbito: el ocio y las grandes aglomeraciones. 

Dentro de los espacios de ocio, el principal requisito para su exigencia es querer acceder a un local cerrado, quedando excluidas de momento las terrazas. Así, en los negocios de hostelería, tales como restaurantes o bares de copas, se deberá presentar el justificante de que se cuenta con la pauta completa de vacunación o se ha pasado la enfermedad si se quiere consumir en su interior. Esto también va a afectar a las discotecas, uno de los principales focos de las restricciones a lo largo de toda la pandemia. 

Otros lugares en los que se podrá regular el acceso con pasaporte COVID son los espacios culturales, tales como cines, teatros o salas de espectáculos, en los que se llega a concentrar un buen número de personas y en los que, con un aforo del 100%, es imposible que se guarde la distancia de seguridad. 

En los espacios al aire libre, también es posible que se solicite contar con la pauta completa de vacunación si se quiere acceder a un estadio de fútbol o a un concierto, los eventos en los que puede haber una mayor masificación. También relacionado con las competiciones deportivas, la posibilidad de exigir el pasaporte COVID se extiende a los pabellones cerrados. 

Con todo, por el alto nivel de vacunación en España, no parece probable que se implante la obligación de contar con el pasaporte COVID para acceder a los centros de trabajo ni la obligación de vacunarse al personal sociosanitario.