Se investigan podas drásticas realizadas en cinco ficus del polideportivo municipal de Sanlúcar
Ecologistas en Acción denuncia la falta de protocolos y reclama una ordenanza municipal para proteger el arbolado urbano
La intervención, realizada sin informe medioambiental previo, reabre el debate sobre la gestión y conservación de los árboles en la ciudad
Ecologistas en Acción critica las podas de Emulisan en Sanlúcar
La reciente poda de varios ejemplares de Ficus elastica en el interior del complejo polideportivo municipal ha generado preocupación entre colectivos ecologistas y ha abierto un debate sobre los procedimientos de gestión del arbolado urbano en la ciudad. Cinco ficus de gran porte y otros dos árboles de menor tamaño fueron sometidos hace una semana a una intervención que, según Ecologistas en Acción, excede los criterios aceptados por la arboricultura moderna.
Los árboles, con un perímetro de tronco estimado entre metro y medio y dos metros, han perdido la práctica totalidad de sus copas y ramas. Las heridas generadas por los cortes, de hasta 30 centímetros de diámetro, son consideradas por especialistas como puntos críticos de entrada para patógenos y factores de debilitamiento prolongado.
Ecologistas en Acción considera que la actuación podría comprometer seriamente la supervivencia de los ejemplares y recuerda que la eliminación total de la copa está desaconsejada en especies perennes. Según el colectivo, esta práctica reduce la capacidad fotosintética del árbol y lo deja expuesto a infecciones que pueden manifestarse años después.
El responsable municipal de Hacienda e Infraestructuras, David González, trasladó al colectivo ecologista que la poda se habría realizado sin conocimiento previo de su área ni de la Delegación de Medio Ambiente, encargada habitualmente de emitir informes técnicos. De confirmarse, el hecho evidenciaría fallos de coordinación interna y ausencia de control sobre las actuaciones en zonas verdes.
Fuentes municipales han señalado además que, en años anteriores, otros ficus del mismo recinto fueron sometidos a intervenciones similares, aunque sin denuncia pública. Según Ecologistas en Acción, aquellos ejemplares no han recuperado todavía su estructura foliar original.
Entre las explicaciones recibidas por el colectivo figuran posibles daños de raíces a edificaciones cercanas o prevención ante la caída de ramas en días de viento. Sin embargo, los ecologistas cuestionan estas razones, señalando que la mayoría de los árboles se encuentran alejados de construcciones y que existen alternativas menos drásticas para garantizar la seguridad, como cortes selectivos o restricciones temporales de acceso.
Debate sobre la regulación del arbolado urbano
El Consejo Asesor Municipal de Medio Ambiente ha propuesto en diversas ocasiones la aprobación de una ordenanza específica para la protección del arbolado urbano. Dicho órgano respalda una moratoria en las talas y un marco normativo que establezca criterios técnicos claros en podas, mantenimiento y gestión. Por el momento, el gobierno local no ha avanzado en la adopción de esta normativa.
En ausencia de una ordenanza municipal, el colectivo ecologista sostiene que existe un vacío legal que dificulta la exigencia de responsabilidades cuando se producen podas drásticas en zonas urbanas. Por ello, Ecologistas en Acción ha solicitado nuevamente la aprobación de una regulación específica y la elaboración de un plan de poda basado en estándares europeos y en criterios de arboricultura científica.
Mientras continúan las conversaciones y peticiones formales, la situación de los ficus intervenidos permanece bajo observación. Su evolución en los próximos meses podría ofrecer indicios sobre el impacto real de la poda y sobre la necesidad, defendida por varios sectores ciudadanos, de reforzar la protección y gestión técnica del arbolado municipal.
Temas relacionados
No hay comentarios