El fiscal solicita siete años de prisión para A.E.B., indocumentado y sin antecedentes penales, a quien acusa de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros por haber pilotado una embarcación repleta de inmigrantes que llegó a la Los Caños el pasado 13 de enero tras cruzar el Estrecho. El juicio ha sido señalado para mediados de este mes en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Cádiz.

La patera partió de un lugar no precisado de la costa marroquí, explica el escrito de calificación provisional del fiscal, con destino a la costa española. Tenía unos ocho metros de eslora y los "colores desgastados", dada su antigüedad y poco mantenimiento. También eran apreciables daños en el casco. El motor carecía de número de serie.

La embarcación, de madera, era totalmente inadecuada para el trayecto que realizó (cruzar el Estrecho de Gibraltar) y el acusado era plenamente consciente del peligro en el que ponía la vida y la integridad de las personas que iban a bordo, señala el fiscal.

El procesado, explica el fiscal, sabía que la patera carecía de todo tipo de medidas de seguridad, que los ocupantes no llevaban chalecos salvavidas y que no había en la embarcación elementos que sirviesen para comunicarse con el exterior en caso necesario. Tampoco ningún otro instrumento que pudiera servir para prevenir cualquier contingencia que pudiera presentarse.

En la patera viajaban 18 personas de nacionalidad marroquí y una más de nacionalidad colombiana, indica el escrito de acusación. Esto es, el piloto (probablemente marroquí) y 18 inmigrantes que pretendían entrar en España de manera clandestina.

Los inmigrantes, que viajaban cubiertos con una lona negra, habían pagado dinero (una cantidad no precisada, dice el fiscal) para realizar el trayecto. El acusado, agrega el fiscal, ejercía labores de dirección: tripulaba la embarcación y controlaba el rumbo y al resto de las personas que iban en la patera.

Un helicóptero avistó la embarcación hacia las una y veinte de la tarde del pasado 13 de enero a unas dos millas del Faro de Trafalgar. La patera arribó poco después a la playa de Los Castillejos, en el municipio de Barbate. Allí la esperaba la Guardia Civil.

Uno de los ocupantes de la patera fue detenido inmediatamente porque los agentes que acudieron a la playa observaron indicios de que era el piloto de la embarcación.