Su indefensión fue total. Su abogado, José Luis Ortiz Miranda, no se mordió la lengua en su día. Y no se la ha mordido en la reclamación que ha interpuesto para que indemnicen a su defendido. El letrado se quejó que la juez que instruyó el caso, la titular del Juzgado 2 de Barbate, "secuestró las actuaciones seis meses, sin hacer una sola diligencia". Y más: "El fiscal se opuso tajantemente a que testificaran testigos que vieron a Jesús y al otro absuelto ayudar a las víctimas, señalando que eran testigos falsos que obligarían a deducir testimonios por otros delitos". Y es que, incide en su reclamación, "sufrió una injusta e insólita decisión judicial". La familia accidentada, el hombre que murió, su mujer y su hijo, que sufrieron graves lesiones, eran de Barbate. "Fue un montaje. Si hubieran investigado no hubiéramos ido a la cárcel", se lamentó Jesús. El conductor que causó el accidente (que huyó, carecía de permiso y dio positivo) fue condenado a seis años.