La almadraba de Barbate cambia las 'levantás' por una 'piscina' de engorde

La empresa desvía los atunes hacia una jaula de redes y pospone su captura mientras ganan valor · La estrategia ha provocado malestar en las otras tres artes gaditanas, que ya están liberando piezas

Dos atunes en el copo de la almadraba de Barbate, en una fotografía de la última campaña.
Dos atunes en el copo de la almadraba de Barbate, en una fotografía de la última campaña.
J. Garret / J. M. Ruiz / Cádiz

28 de mayo 2011 - 05:01

La almadraba de Barbate, una de las cuatro que se calan en la costa gaditana, ha cambiado este año su estrategia de faena: en lugar de capturar los atunes cuando las condiciones del mar lo permiten, como corresponde a este arte trimilenario, ha habilitado una piscina de redes a la que deriva los peces para proceder a su engorde, según han confirmado varias fuentes del sector pesquero. El método ha provocado el enfado del resto de empresas almadraberas, las instaladas en Zahara, Conil y Tarifa, que están faenando con normalidad. La organización que agrupa a estas empresas, la OPP-51 (Organización de Productores Pesqueros de Almadraba) prefirió no ofrecer ayer ninguna valoración sobre la actividad de la firma barbateña.

Tampoco fue posible contactar a lo largo de la tarde con los responsables de la empresa Pesquerías de Almadraba, propietaria de las artes caladas en Barbate. Sí está confirmado que en la jaula habilitada junto a las redes se agrupan cientos de piezas, a las que se alimenta principalmente con caballas, sardinas y jureles, de forman que están incrementando día tras día su tamaño y su valor en el mercado. Fuentes consultadas por este medio indicaron que el objetivo de la empresa es retrasar la extracción de los peces hasta que conozca exactamente cuál es su cupo para este ejercicio. Al posponer las levantás, la almadraba barbateña llegará al mercado más tarde pero con menor competencia, cuando el resto de compañías ya hayan despachado su mercancía. Además, los atunes tendrán más peso y más valor.

Otras fuentes del sector pesquero consultadas ayer despreciaron estos métodos porque suponen una competencia poco leal al resto de artes gaditanas, y porque además está en contra de la pureza con la que siempre se ha pretendido vincular a la artesanía almadrabera: el arte es fija, el atún pasa en su migración y algunos son capturados en ese momento. Las jaulas de engorde, de hecho, han sido una de las prácticas más censuradas de la flota industrial durante los últimos años. También hay fuentes que defienden esta actividad de engorde durante algunas semanas como una buena idea desde el punto de vista comercial.

Hace dos años, la empresa catalana Balfegó, dedicada a la pesca industrial del atún, y colectivos ecologistas denunciaron públicamente a los almadraberos por retener atunes en sus redes. Los pescadores locales lo hicieron durante algunas semanas, tras agotar su cuota, a la espera de saber si podían disponer de más margen.

Mientras la almadraba de Barbate engorda atunes, las artes de Conil, Zahara y Tarifa avanzan a máximo ritmo en el desarrollo de la temporada pesquera. La gran cantidad de atunes que está proporcionando la migración de 2011 ha provocado que las tres almadrabas estén liberando ya atunes, según confirmaron ayer fuentes de OPP-51. "Se han producido ya varias sueltas. Hay muchos atunes. Los buzos ven que siguen entrando en las redes y no hay más remedio que liberar cantidades controladas de forma que nos podamos ajustar a la cuota establecida. Los científicos siguen contabilizando a los que salen y marcando a otros para su estudio". La organización gaditana cree que es una señal de que los planes internacionales de recuperación del atún rojo "están dando sus frutos".

Los pescadores de Conil, Zahara de los Atunes y Tarifa están cerca de agotar sus cuotas iniciales (el total asignado a las almadrabas es de 637 toneladas) aunque siguen sin conocer el plus disponible a través del intercambio con otros países o de la compra a otras flotas. Portugal, finalmente, no ha instalado las dos almadrabas previstas. Las empresas gaditanas confían en que el Gobierno central pueda conseguir esta cuota extraordinaria, "que de otra forma se perderá".

El Ministerio de Medio Marino, sin embargo, continúa sin tomar decisiones y, después de varios meses de retrasos, sigue sin publicar todavía la orden que permitirá la adquisición de márgenes de pesca entre las mismas empresas españolas. Por primera vez, las almadrabas gaditanas no comprarán cuota en conjunto, sino de forma individual, informó la OPP-51, que no aclaró las causas de esta decisión.

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