El alcalde de Alcalá del Valle que lloró de impotencia en el Covid busca dirigir IU Andalucía

Sierra/El actual aspirante a dirigir la formación de IU en Andalucía y alcalde de Alcalá del Valle, Rafael Aguilera, protagonizó el 24 de marzo de 2020 una imagen icónica por la que han pasado cinco años y que resume momentos muy duros de lo que fue la crisis del Coronavirus y un país cerrado a cal y canto por culpa del ‘bicho’. Rodeado de guardias civiles y prensa, Aguilera, el alcalde de Alcalá del Valle, enfundado en una bata blanca y sostenido por otra persona, se desmorona de impotencia, de dolor, delante de una residencia de ancianos de su pueblo.

Había vivido en ese instante que refleja la instantánea 13 días a contrarreloj porque el virus había barrido el asilo, en el que ya habían fallecido dos abuelos y se temía por la vida de otros tantos, que fueron desalojados a otra residencia de La Línea de la Concepción por orden de la Junta de Andalucía, a pesar de sus esfuerzos como regidor por retenerlos y habilitar espacios del pueblo para su cuidado. Era el llanto de un alcalde desbordado, que dio la vuelta a España, abriendo telediarios. El mismo dirigente político que ahora se postula para dirigir IU en Andalucía. “No permitiremos que nuestros mayores se nos mueran en nuestras manos”, llegó a decir frente a las cámaras de televisiones de ámbito nacional apostado a las puertas de la residencia de mayores La Pasionaria. Esa frase la pronunció Aguilera cuando llevaba menos de un año como alcalde. Rafael Aguilera se estrenó en el cargo en junio de 2019 tras sustituir a la ex alcaldesa, Dolores Caballero, también de IU. En aquellos comicios municipales se enfrentó durante casi una hora a la incertidumbre, puesto que un error en el envío de los resultados de una mesa electoral abrió la posibilidad de un cambio político en el pueblo. Pero, finalmente, eso se subsanó.

Lo del Coronavirus y la residencia de ancianos de este pueblo de unos cinco mil habitantes marcó a Rafael Aguilera, recién llegado a la vida pública, que se enfrentó a todo y a todos los estamentos de las administraciones superiores para que los suyos no cayeran frente al bicho. Llegó a pedir, incluso, un estudio epidemiológico para la población de su pueblo para poder hacer frente al Coronavirus. Llevaba, entonces, apenas un año como alcalde al frente del Ayuntamiento de un pueblo temporero, emigrante y curtido en mil batallas al que tenía que dar respuestas urgentes.

Ahora, Rafael Aguilera encabeza una candidatura alternativa que aspira a liderar Izquierda Unida en Andalucía, enfrentándose a la lista que presenta el actual coordinador regional, Toni Valero. La candidatura de Aguilera para competir por las riendas de la dirección regional de IU se denominada ‘Volver al origen’, un eslogan que parece toda una declaración de intenciones de proximidad, confluencias de pareceres, de volver a liderar la unidad de la izquierda, del tú a tú…

De bregar con el campo, de sus sinsabores y del jornal, también, le cae cerca a Rafael Aguilera. Tan sólo hay que echar un vistazo a lo que le rodea en su pueblo con familias emigrantes en Francia, temporeros de la manzana y la uva… No en vano, Aguilera llegó a gestionar antes de entrar en la Alcaldía en 2019, la Cooperativa agrícola Los Europeos, una entidad que comercializa la producción del espárrago verde que se produce en el municipio, que da empleo a decenas de mujeres y que es una de las insignias económicas locales.

Precisamente, de movilizaciones y reivindicaciones saben los vecinos de Alcalá del Valle, el pueblo del aspirante a coordinador regional de IU, que han movido cielo y tierra para buscar un trazado alternativo a la carretera de acceso al pueblo, la de Lora, que impedía que los grandes camiones que sacaban la mercancía de los espárragos para su comercialización y exportación pudieran transitar sin poner en peligro la seguridad vial. Aguilera logró sellar esa otra fotografía con los altos dirigentes de la Junta de Andalucía, responsables de la puesta en servicio de este nuevo desdoble. Como también plantarse, con todo lo que le pudiera caer encima, para que en su pueblo no se abriera un segundo salón de juegos recreativos para evitar que la gente más joven se enganche a ello.

En medio de esto y tras presentarse a su reelección por segunda vez como alcalde en mayo de 2023, donde arrasó con mayoría absoluta en la interminable pugna política que Alcalá del Valle mantiene entre IU y PSOE, llegaba en octubre de ese mismo año un varapalo para la formación izquierdista local: el Tribunal Supremo confirmaba la condena de ocho años y medio de inhabilitación a su predecesora en el cargo, la ex alcaldesa de Dolores Caballero, por firmar 128 contratos irregulares en el Ayuntamiento serrano.

También Rafael Aguilera se ha topado con la Justicia por alguna movilización, de la que ha salido absuelto como en la que participó, en 2013, en plena crisis económica. Fue en la sonada operación del sindicato SAT, cuando junto a otros miembros se llevaron nueve carros de productos de un hipermercado de Sevilla, en señal de protesta ante la precariedad de muchas familias.

El alcalde alcalareño, que aspira a liderar IU en Andalucía, ha atraído hace unos días, también, los focos al llevarse debajo del brazo botellas de aceite de oliva de la Sierra de Cádiz para dárselas, promocionando este producto, a las autoridades chinas en un viaje al país asiático en el marco del Primer Diálogo de Alcaldes España-China 2025, en el que participó junto a otros 13 alcaldes españoles para defender los servicios públicos.

‘Rafi’, como le llaman sus paisanos del Alcalá del Valle, donde se asienta el único restaurante de la Sierra que ostenta la primera Estrella Michelin desde hace pocos meses, Mesón Sabor Andaluz, da estos días una nueva pirueta en su trayectoria para encabezar esta lista en la pugna por dirigir IU en Andalucía.

El pulso entre Rafael Aguilera y el actual coordinador regional Toni Valero tendrá su desenlace a principios de junio tras las votaciones de la militancia. De momento, las cartas están echadas.