Vejer cierra el Congreso del Bienestar con ganas de repetir
El alcalde, José Ortiz, asegura que las expectativas se han superado con creces y apuesta por acoger la segunda edición
El alcalde de Vejer, José Ortiz, no se imaginaba lo que podría significar para su municipio acoger el primer Congreso del Bienestar que le propusieron organizar desde la Cadena Ser hace más de un año. Durante este tiempo ha sido mucha la labor organizativa, cuyos frutos se han recogido en este fin de semana, tres días en los que esta localidad jandeña se ha convertido en punto de referencia nacional para buscar el bienestar. Tanto es así que a Vejer han llegado profesionales de muchos rincones de la península atraídos por el amplio plantel de pensadores y eruditos, que han trasladado ideas, propuestas, métodos y, sobre todo, conocimiento para lograr el bienestar personal y profesional y para intentar hacer una sociedad más llevadera.
Ortiz espera lograr que la segunda edición de este congreso también se celebre en su localidad. El comercio local se ha visto sorprendido por esta avalancha de personas atraídas por el Congreso del Bienestar y por la ciudad. En su opinión, "estamos todos realmente contentos y satisfechos por el desarrollo del mismo, las ponencias han sido increíbles, magníficas, invitan a la reflexión, han estado ponentes de gran talla intelectual y, además, el sector turístico del municipio está muy satisfecho".
Todas las conferencias han tenido un importante valor, pero dos han supuesto el punto álgido de este primer congreso. Por un lado, la ofrecida el viernes por Emilio Duró, con una comunicación dinámica y divertida que supuso "un subidón de autoestima" para los asistentes. Su alocución buscaba mejorar la motivación y la mentalidad positiva de los asistentes frente a los nuevos retos, facilitando nuevas ideas para gestionar los cambios, mejorar la vida personal y profesional, promocionar técnicas para gestionar las emociones, vencer los miedos que nos atenazan y asumir la responsabilidad de nuestras vidas y acciones.
De esa disertación de Emilio Duró, al que muchos llaman 'El gurú de la felicidad', salieron frases como: "Creo que nos tenemos que adaptar, que las nuevas generaciones nos mandan ese mensaje de evolución", "la felicidad está en la cabeza; por eso algunos somos felices en el trabajo y otros no", "quiero copiar a aquellos que son felices y no hacer caso a los que me dicen cómo conseguirlo", "cuando hay un problema el pesimista pregunta quién ha sido, el optimista pregunta qué puede hacer" y "nacemos buscando amor y morimos buscando amor", entre otras.
La segunda de las propuestas esperadas fue el cara a cara del profesor de la Universidad Autónoma de Madrid, licenciado en Teología por la Universidad Gregoriana de Roma y catedrático de Ética, Javier Sádaba, y Sor Lucía Caram, nacida en la ciudad argentina de Tucumán y que lleva 25 años en Manresa ayudando a los que más lo necesitan. Esta monja de clausura asegura que su claustro no son cuatro paredes sino el mundo.
El debate entre ambos, titulado ¿Con Dios o sin Dios? y moderado por Jordi Pigem, logró captar la atención del público que abarrotaba el teatro San Francisco desde el primer momento. Ambos lanzaron propuestas contradictorias sobre los planteamientos de su oponente en torno a la existencia de Dios, que permitieron abrir un distendido debate entre los presentes. Eso permitió sacar frases por parte de Sor Lucía Caram como: "He invertido todo en el servicio a los demás, y esa es mi fuente de la felicidad y el motivo que mueve mi fe" o "Dios no es lo que te cuentan, es lo que tú vives".
Por su parte, Javier Sádaba dejaba enunciados como: "Sabemos poquísimo sobre la existencia de personajes católicos como Moisés o Jesucristo" o "Jesús no se ríe nunca en el evangelio y, sin embargo, llora a menudo".
También feliz ha estado estos tres días el artista franco-suizo Thoma Vuille, que aseguraba que "en Vejer lo he flipado", ya que sus dibujos de Monsieur Chat han decorado calles, paredes y balcones e incluso la fachada del teatro San Francisco.
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