El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mantenido este jueves una reunión de trabajo con el consejero delegado de Airbus, Guillaume Faury, en la que han realizado un repaso de los programas aeronáuticos y de defensa desarrollados conjuntamente. Se trata del tercer encuentro al más alto nivel entre ambas partes desde 2020 y ha contado con la presencia de las ministras de Defensa, Industria y Ciencia, Margarita Robles, Reyes Maroto y Diabna Morant, respectivamente. 

Entre otros puntos, "en la reunión se ha abordado el futuro de la planta de Airbus en Puerto Real, así como la situación del empleo de la compañía en España", según ha informado el Gobierno en un comunicado, sin dar más detalles sobre este asunto. Airbus está reestructurando su presencia en la Bahía de Cádiz y prevé clausurar en 2024 la planta de Puerto Real para centralizar todas sus operaciones industriales en el Centro Bahía de Cádiz (CBC) de El Puerto de Santa María. 

La reestructuración implica la ampliación las instalaciones del CBC para asumir la carga de trabajo de Puerto Real, y la factoría portuense dejará de estar adscrita a la división militar para depender a partir de ahora de Airbus Operaciones, que agrupa el negocio de construcción civil. La compañía se ha comprometido con UGT y CCOO a mantener los empleos directos en la Bahía.

El uso de la factoría está en el aire una vez que Airbus abandone las instalaciones. Se ha formado un grupo de trabajo formado por la Junta, el Ministerio de Industria, la compañía y los sindicatos para estudiar alternativas, aunque todavía no se ha llegado a ninguna conclusión.

En el comunicado, el Gobierno insiste en que Airbus es un socio "clave" y que próximamente se lanzará el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) aeroespacial. Por su parte, la compañía ha informado de su disposición de "elevar la apuesta por el I+D en programas estratégicos de futuro en España relacionados con la reducción de emisiones y posterior descarbonización de la aviación". 

Se trata del primer encuentro desde que se conociera un informe interno de Airbus en el que se criticaba duramente al Gobierno por el retraso que acumula el Perte y su "descoordinación" para gestionar las ayudas al sector. La empresa minimizó posteriormente el escrito argumentando que "no representaba su posición".

Las críticas al Ejecutivo llegaron a pesar de que el Gobierno de Pedro Sánchez se había comprometido a movilizar un plan de ayudas dotado con 300 millones hasta 2025, así como la compra y transformación en Getafe de tres A330 en aviones de repostaje en vuelo, la adquisición de cuatro C295 que se ensamblan en Sevilla para la Patrulla Marítima y más de 60 helicópteros para los Ministerios del Interior y Defensa.