indicadores socioeconómicos

Radiografía de la desigualdad en las tres principales ciudades gaditanas

Barriada de El Saladillo en Algeciras.

Barriada de El Saladillo en Algeciras. / Jorge del Águila

Las tres principales ciudades de la provincia (Jerez, Algeciras y Cádiz)aparecen en el 'V Informe del Observatorio de Desigualdad de Andalucía', el acercamiento más reciente desde la institución del mismo nombre a la realidad socioeconómica andaluza.

Según el análisis que muestran tanto Ibán Díaz Parra, de la Universidad de Sevilla (Cádiz y Jerez), como Rocío Vela-Jiménez, de la Universidad Loyola (Algeciras), las tres poblaciones que superan los 100.000 habitantes en la provincia muestran diferencias entre sí pero, también, un elemento persistente y común: el alto nivel de desempleo. No obstante, el nivel de ingresos en las tres se mantiene, también, en una línea similar a la de otras poblaciones andaluzas de gran tamaño.

Entre las peculiaridades, en la capital gaditana, por ejemplo, no encontramos una fragmentación social tan acusada como en las otras dos localidades, pero es la que presenta un mayor envejecimiento y problemas de despoblación. El centro de Jerez lleva décadas afrontando su deslome demográfico, pero cuenta con un término municipal muy amplio, “a menudo, con construcciones en suelo irregular”. Mientras que las barriadas de la Zona Sur de Algeciras presentan unos “graves” índices de exclusión, en un escenario que parece enquistado.

CÁDIZ

Como sabemos, Cádiz es la capital andaluza que sufre la mayor sangría demográfica de Andalucía –en los últimos 20 años, ha perdido 23.000 habitantes–, con indicadores sociales globales muy negativos. La falta de espacio en la ciudad ha derivado en “estrategias fuertemente especulativas con el suelo desde muy atrás en el tiempo y dinámicas inflacionarias que no se corresponden con una economía más bien estancada tanto en la ciudad como en la Bahía”.

Aun así, la ciudad no ofrece, señalan, ejemplos de “desigualdades extremas que, sí podemos encontrar en otras ciudades de mayor tamaño, como Sevilla y Málaga, además de contar con un centro histórico que, al contrario que las ciudades mencionadas, mantiene su carácter popular”.

Actualmente, Cádiz se encuentra entre las ciudades con mayor nivel de renta de Andalucía, junto con las otras capitales de provincia y grandes ciudades (todas con una renta media por hogar superior a los 30.000€ anuales). “No obstante tiene una tasa de desempleo relativamente elevada que comparte con la mayor parte de la provincia (en el tramo entre el 25% y el 30%) y un envejecimiento relativamente alto y superior a otras capitales (más del 25% de la población mayor de 65 años)”.

Destaca el informe que es “notable” la ausencia de “barrios muy privilegiados en cuanto ingresos en el recinto histórico, con la excepción de San Carlos, así como de barrios especialmente desfavorecidos en ingresos (menos de 20.000 euros por hogar)”. Casi todo el centro histórico y gran parte del ensanche obrero arrojan tasas de paro por encima del 30%.

ALGECIRAS

De un lado, la actividad portuaria de Algeciras ofrece “sustanciales oportunidades laborales en relación con el sector servicios y de transporte de mercancías, así como facilita la presencia natural de una gran interculturalidad”. No en vano, hoy se encuentran censados 10.104 migrantes (de los cuales casi el 63% provienen de Marruecos), lo que supone más de un 8% de su población. Sin embargo, ambas circunstancias vienen impregnadas de una “sensación de inseguridad que vertebra y atraviesa la vida en la ciudad, tanto en relación con el tráfico de drogas como en una delicada convivencia intercultural que no siempre se gestiona en positivo”.

Si algo caracteriza a Algeciras, apuntan en el estudio, es su fragmentación entre la vieja y nueva Algeciras, con el centro concentrando algunas de las zonas más desfavorecidas, “especialmente en la parte Sur y Oeste del casco urbano, con promociones públicas de viviendas construidas a partir de la década de los 40, e intensificada a partir de los años 60-70. Estas áreas urbanas presentan hoy una profunda vulnerabilidad residencial de difícil solución”. La ciudad cuenta con barrios con índices “graves” de exclusión social como El Saladillo, La Piñera, La Yesera o Pescadores.

A pesar de existir una población eminentemente joven, con una media de edad de 41 años, la tasa de desempleo es del 28,2% , con rentas inferiores a los 20.000 euros en la Zona Sur.

Como conclusión, “la ciudad de Algeciras supone hoy día una de las zonas donde las desigualdades urbanas y sociales impactan de forma diferencial y preocupante”.

JEREZ

Jerez se caracteriza por ser una “ciudad con importantes bolsas de pobreza y con pocos barrios privilegiados. A pesar de tener un gran acervo patrimonial cuenta con un centro histórico que (al igual que el de Cádiz) mantiene su carácter popular y, al contrario que cualquier otra ciudad andaluza de tamaño mayor o similar, sigue contando con sectores muy deteriorados y deprimidos. También se caracteriza por contar con una gran cantidad de pedanías, diseminados y vivienda dispersa en su término, a menudo fruto de la ocupación irregular del suelo”.

Durante el siglo XX, la tendencia fue de abandono del centro y de “tugurización y desplobamiento de San Miguel y Santiago”. Así, a pesar de ser un destino turístico, “sigue manteniendo grandes bolsas de edificación deteriorada y un centro que ha continuado envejeciendo y perdiendo población a pesar de las inversiones públicas en rehabilitación”.

Actualmente, en el conjunto de Andalucía, como corresponde a una ciudad de su tamaño, Jerez tiene una renta relativamente alta, entre 25.000 y 30.000 euros por hogar al año. No obstante, se encuentra en un tramo de renta inferior al del resto de grandes ciudades: Sevilla, Málaga, Jaén, Granada, Córdoba o Cádiz, con un dato medio por encima de los 30.000 euros anuales. Esto coincide con “tasas de desempleo relativamente altas, a semejanza de la mayor parte de la provincia de Cádiz (25-30%), con una población relativamente poco envejecida”.

La distribución de la renta en Jerez tiene un cono de altos ingresos que parte de puerta de Sevilla y cubre todo el ensanche la avenida Álvaro Domecq y su extensión hacia el noreste. En el lado contrario, las rentas más bajas parten del propio centro histórico, San Miguel y Santiago y los desarrollos obreros.