La sala de prensa de La Chanca en Conil ha acogido un encuentro de representantes institucionales, y del sector pesquero, que ha desembocado en la firma de un acuerdo conjunto donde se posicionan en contra de la creación de un parque eólico marítimo frente a las costas de la Janda. El documento refleja detalladamente, el porqué de su oposición a dicho equipamiento energético, a pesar de ser de energía renovable.

Todos los presentes, Inma Sánchez, alcaldesa de Conil; Dolores de Melo, concejala de Playas del Ayuntamiento de Vejer y Juan Miguel Muñoz, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barbate, junto a Manuela Leal, patrona mayor de la Cofradía de Pescadores de Conil, y Marcelo Monge de la empresa almadrabera, Petaca Chico, fueron exponiendo sus argumentos en contra de la propuesta enviada al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico por la empresa Ferrovial.

Según argumentó la regidora conileña, “los ayuntamientos de Barbate, Vejer y Conil han recibido una notificación donde se les consulta sobre la pretensión por parte de la empresa Ferrovial de la instalación de un parque eólico marino denominado Almadraba”.

Inma Sánchez, recordó que ésta no es una cuestión nueva para ellos, ya que “ha habido bastante intentos anteriormente”, dado que “la zona del mar de Trafalgar es propensa al viento y donde se dan unas circunstancias climáticas favorecedoras para cierto tipo de energía alternativa”.

Ante este panorama la alcaldesa de Conil apuntó que se ha hecho un frente común que se ratificaría con la firma de un documento, aparte de la contestación que cada ayuntamiento realice por su cuenta al Ministerio.

En esa documentación se explicará, que “pasar de que estamos todos de acuerdo con las energías alternativas y renovables, entendemos que no podemos permitir esta instalación frente a nuestra costa por motivos evidentes que afectan al sector pesquero de primera mano,  motivos que afectan al sector almadrabero, donde se generan una cantidad de puestos de trabajo importantísimos, y por motivos medioambientales, de migración de aves, y por motivos estéticos”,  entre otros.

La alcaldesa de Conil, dijo que “son motivos que afectan de primera mano al sector turístico, al pesquero, al almadrabero, a la migración de aves, y ante esto decimos, alto y claro, que no queremos este tipo de instalaciones frente a nuestras costas”.

En parecidos términos se pronunciaron la edil de Economía, Hacienda y Playas del Ayuntamiento de Vejer, Dolores de Melo, el portavoz del equipo de gobierno del Consistorio de Barbate, Juan Miguel Muñoz, y la patrona mayor de la Cofradía de Pescadores de Conil, Manuela Leal.

Igualmente tomó la palabra el director de la empresa almadrabera, Petaca Chico, Marcelo Monge, quien expuso que “a nivel de pesca es brutal porque la pesca artesanal de la OPP-72 destroza toda su maniobrabilidad dentro de sus zonas de pesca. A nivel de las almadrabas, como se ha comentado, los atunes tienen su ruta fija, si obstaculizamos puede haber problemas, eso es imprevisible, nadie lo sabe, y el atún, no sólo el nuestro, la entrada al Mediterráneo podría ser brutal, las consecuencias ni se sabe”. Según argumentó, hay mucha pesca, en Italia, Túnez, que no es solo España ni Cádiz”. 

Posteriormente dijo que “las almadrabas de la provincia de Cádiz, que son las únicas de España, la OPP-51 y la nuestra (Petaca Chico), trabajan muy bien con su producto, han conseguido posicionarlo dentro del sector hostelero de España y de todo Europa en la alta cocina. Es un trabajo que da prestigio a esta región de España, donde se han equilibrado las ventas con las exportaciones hacia Asia, y bueno, sería una pena que después de todo ese trabajo que ha creado empleo y riqueza en esta zona, pues por un interés mal calculado, como todos hemos dicho que hay renovables, pero habrá más costa donde ponerlos probablemente, que en esta”. Recordó que estarán en todas las plataformas que les pidan ayuda.

Por su lado, desde la Organización de Productores Pesqueros de Almadraba (OPP-51), que agrupa a las empresas que operan las almadrabas de Conil, Zahara de los Atunes y Tarifa, están altamente preocupados por “el inesperado resurgimiento de iniciativas de producción de energía eólica off-shore frente a la costa gaditana como la de Ferrovial”.

Esta iniciativa, según explican, “parece despreciar deliberadamente que la ubicación que para su instalación contempla se encuentra calificada como zona de alto potencial para la conservación de la biodiversidad y para la acuicultura marina en el Plan de Ordenación del Espacio Marítimo (POEM) de la Demarcación marina sudatlántica. Un POEM, aprobado a finales de febrero de este año, que por el contrario no incluye zonas para el desarrollo de la energía eólica”.

Así, la OPP-51, añade que se encuentra analizando con detenimiento el Documento Inicial de Proyecto. Además, se están considerando otras actuaciones que se quieren coordinar con instituciones y agentes sociales locales que han mostrado también su recelo o abierto rechazo al proyecto como ocurrió ayer en Conil.

Recuerdan que como años atrás ya hizo con otros proyectos similares la Organización de Productores Pesqueros de Almadraba (OPP-51), hará ver, “ante quien haga falta y por cuantos medios resulten necesarios, los impactos negativos e inasumibles riesgos que este tipo de instalaciones off-shore conllevan para la subsistencia de la actividad almadrabera  y se incidirá en las repercusiones de diferente orden que la desaparición de dicha actividad pesquera acarrearía en poblaciones como Conil, Barbate, Zahara de los Atunes y Tarifa en las que el atún rojo y el arte de pesca la almadraba son ya desde hace tiempo bastante más que una especie que se captura y la forma de hacerlo”.