La Guardia Civil destapa una red de ciberestafas y blanqueo asentada en San Fernando
La Guardia Civil de Asturias investiga a ocho personas de entre 20 y 30 años.
Los ciberdelitos más frecuentes
Cádiz/La Guardia Civil de Asturias investiga a ocho personas de entre 20 y 30 años que supuestamente pertenecen a una organización criminal asentada en Cádiz por la comisión de los delitos de estafa continuada, delincuencia organizada, blanqueo de capitales, usurpación de estado civil y falsedad documental, según ha informado este jueves la Comandancia de Oviedo.
La investigación de la denominada 'Operación Cerbero' se inició en octubre de 2020 en el cuartel de Pravia a raíz de la denuncia de un hombre que había comprado un cachorro de perro a través de una página web de compraventa y que no llegó a recibir el animal una vez ingresada la mitad del dinero pactado ni pudo contactar con el supuesto vendedor.
Según los investigadores, los supuestos vendedores ofertaban en portales o plataformas de internet la venta de mascotas u objetos muy por debajo de su valor de mercado y, una vez captadas las víctimas, les instaban a realizar un pago a través de Bizum para lograr una transferencia bancaria inmediata o bien un desembolso a través del método efectivo móvil (HalCash) y nunca entregaban los efectos comprados ni devolvían el dinero.
También empleaban otra forma de estafa, consistente en contactar con anunciantes en internet para mostrar su interés en la compra de algún objeto a través de la plataforma Bizum. Sin embargo, se limitaban a mandar una solicitud de dinero que en muchos casos era aceptada por el vendedor al no estar familiarizados con dicha plataforma, con lo que obtenían ingresos sin realizar la compra.
Para dificultar la labor policial, la banda canalizaba los pagos a través de múltiples cuentas bancarias, muchas de las cuales habían sido abiertas usurpando la filiación de víctimas anteriores, utilizando además líneas telefónicas cuya titularidad adjudicaban a identidades falsas o ficticias.
La Guardia Civil de Pravia solicitó la colaboración de distintos organismos y pudo constatar que el grupo criminal tenía como único fin perpetrar estafas a través de medios tecnológicos, adoptando una estructura jerarquizada que evolucionaba o se transformaba en función de los intereses de cada momento.
Entre otras, pidió la colaboración de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Cádiz, para tomar declaración a los investigados al tener su residencia fijada en la localidad de San Fernando.
A lo largo de estos dos años de investigación, la actividad delictiva del grupo no cesó en ningún momento, siendo detenidos o investigados por otras Unidades de la Guardia Civil.
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