El Ministerio del Interior instalará una nueva barrera física en la desembocadura del río Guadarranque para impedir la navegación de las embarcaciones neumáticas dedicadas al narcotráfico que tienen en los chalés de la urbanización barreña de Guadacorte sus bases operativas.

El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, anunció ayer esta medida durante la visita a uno de los chalés con narcoembarcadero -salida directa al río para las lanchas desde el patio trasero- de la avenida Las Golondrinas de Guadacorte, después de que la Policía Nacional y la Agencia Tributaria hayan dado por concluida una nueva operación contra el tráfico de drogas. En este caso, la actuación se ha saldado con 29 detenidos y la aprehensión en total de 4,7 toneladas de hachís a lo largo de varias intervenciones. Sanz estuvo acompañado por el delegado especial de la Agencia Tributaria en Andalucía, Alberto García.

El curso bajo del Guadarranque tuvo en su momento una barrera física con este fin, si bien quedó desmantelada con el paso del tiempo de forma que se han asentado en las viviendas numerosas mafias dedicadas al tráfico de hachís desde Marruecos.

Ahora, según expuso Sanz, la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior trabaja en un nuevo diseño que sea compatible con el cauce del río y eficaz para disuadir a las organizaciones ilegales. Ya se está redactando el anteproyecto tras obtener un visto bueno preliminar a la actuación por parte de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA); también se han solicitado los permisos necesarios a la Junta de Andalucía. El coste y plazos dependerán del diseño final y de la tramitación. Los servicios hidrológicos regionales deben autorizar esta instalación por abarcar al dominio marítimo-terrestre, si bien Sanz sostuvo que la tramitación avanza de forma "ágil".

El delegado del Gobierno hizo alusión a que Guadacorte es un lugar "emblemático" del Campo de Gibraltar que se ha visto salpicado en los últimos tiempos por esta actividad ilícita, por lo que aseguró que desde las fuerzas de seguridad se trabaja en una "batalla hasta el final" contra las redes de narcos con la operación difundida ayer como uno de sus ejemplos.

En este caso, la actuación ha sido desarrollada de manera conjunta por la Policía Nacional y la Agencia Tributaria y ha logrado desarticular una organización muy activa con los ya referidos 29 detenidos y la aprehensión de 4,7 toneladas de hachís en la Operación Cástamo III. Además, han sido intervenidas seis embarcaciones semirrígidas dotadas de potentes motores fueraborda, siete vehículos, tres escopetas, una pistola, un tractor y un quad.

La investigación se inició en 2014 y originalmente se focalizó en La Línea de la Concepción, donde la Policía Nacional había detectado la presencia de esta organización. Los agentes lograron detener entonces, entre otros, a uno de los principales narcotraficantes de hachís de la comarca: un hombre de nacionalidad marroquí y 31 años apodado como Messi. Pero el grupo no quedó desarticulado con este arresto si bien supuso una importante pieza para poder avanzar en la investigación. Supuestamente, Messi se encargaba de coordinar todos los operativos, con contactos en la Costa del Sol y Galicia.

Con posterioridad, y ya a partir de marzo, se desarrolló la segunda fase del operativo, concluido hace ahora unos días. Entre los detenidos figuran los líderes de la trama, los pilotos de las lanchas rápidas, varios "aguadores" (encargados de alertar de la presencia policial) y responsables de custodiar vehículos y embarcaciones.

Así, en tres actuaciones (una en marzo y dos en mayo), los agentes lograron desarticular parte del grupo, detener a un total de doce personas y localizar todo el hachís intervenido a la trama junto con dos lanchas.

Tras la última de las aprehensiones, las investigaciones se encaminaron a registrar seis domicilios y dos naves, en los que se intervinieron cuatro embarcaciones semirrígidas, un embarcación de recreo, un arma corta calibre 22, tres escopetas, un arma corta simulada, cuatro vehículos todoterreno, un tractor y un quad. Además, hubo otros 13 arrestos.

Uno de los domicilios registrados es el chalé de Guadacorte visitado ayer por las autoridades, que dispone de un embarcadero ilegal usado para botar las embarcaciones semirrígidas. El inspector jefe de la Policía Nacional, Enrique Lamelas, destacó la dificultad y el tiempo necesario para establecer todos los vínculos y seguimientos porque las lanchas salían y entraban de las viviendas vacías, ya que cargaban la droga en Marruecos y la entregaban en puntos de la Costa del Sol o de la provincia de Cádiz y Huelva.