El izado de la insignia en el buque Galicia escenificaba ayer, sobre las doce y media de la mañana, la llegada del nuevo Almirante de la Flota (ALFLOT). Juan Rodríguez Garat ocupa ya el cargo que hace apenas unos días dejó vacante Francisco Javier Franco Suanzes como responsable de todos los medios que integran la Flota, con un total de 12.000 hombres y mujeres a su mando.

En la Base Naval de Rota, el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Jaime Muñoz-Delgado y Díaz del Río, le entregaba el bastón de mando a Rodríguez Garat, quien ha sido responsable del Personal de la Armada en su último destino. Precisamente esta experiencia así como sus años en la Fuerza, dijo el AJEMA, le hacen confiar en que la Flota "está en buenas manos para afrontar las capacidades específicas necesarias para garantizar la defensa de España y alcanzar los objetivos de seguridad marítima nacional que establezca el Gobierno de la nación".

El nuevo Almirante de la Flota confesó que toma posesión de su cargo "con la misma sensación indefinible" con la que embarcó en su primer destino y con "esas cosquillas en el estómago propias de los partidos grandes". "Grande por el propio prestigio de la Flota, a la que hoy me reincorporo, y grande por la responsabilidad de estar a la altura de lo que la Armada espera de mí", afirmó.

Entres las responsabilidades que asume, Rodríguez Garat destacó la formación de la dotaciones como "la más importante". "Tenemos que mantener adiestrada la Armada de hoy sin dejar de pensar en la de mañana, preparada para los cometidos que tienen asignados sin olvidar que también formamos a los líderes de la Armada del mañana", apuntó. "Porque es aquí donde nos hacemos militares y marinos, la Flota es en buena parte responsable de lo que valga la Armada de las próximas décadas", destacó.

Además, el almirante definió el presente como una "encrucijada difícil" pero en el que la Flota "sabe cuál es su camino y su papel". "Los riesgos a corto y medio plazo serán los que propongan los enemigos de España, que existen de verdad, y que escogerán el campo de batalla teniendo en cuenta nuestras debilidades. Sobre este terreno de juego tenemos que adaptarnos a ritmo acelerado al que nos condicionan la sociedad, la tecnología y el escenario internacional".

El ALFLOT no se olvidó de los hombres y mujeres que tendrá a su cargo y "aunque son importantes los desafíos que tenemos por la proa - dijo-, sé que en la Armada el factor humano es el que hace la diferencia". "La Flota, una unidad con prestigio, eficaz y con disponibilidad, tendrá el futuro que entre todos podamos construir", concluyó.

Entre un nutrido grupo de autoridades militares y civiles, el Almirante de la Flota embarcaba luego en el buque Galicia para terminar en el mar una ceremonia que se celebró en el muelle de la Base de Rota.