El área de Desarrollo y Bienestar Social de la Diputación provincial niega con rotundidad las denuncias vertidas por el sindicato de funcionarios CSIF sobre los efectos de los recortes en los servicios que se prestan en los centros de mayores de la provincia gestionados por la Corporación Provincial presidida por Loaiza.

De hecho, a este respecto, destacan que "los usuarios no han percibido la crisis, pues no se ha reducido ningún servicio, se mantiene el empleo estructural de 304 trabajadores y se crea empleo a través de los contratos de sustitución y vacaciones mediante contratos a tiempo completo y a tiempo parcial con las retribuciones básicas acorde al convenio, siendo un ejemplo manifiesto de calidad de los servicios y de respecto y dignidad a los derechos de los trabajadores, tanto fijos como eventuales".

Desde la Diputación insisten en que, en la actualidad, "el índice de satisfacción, tanto de familiares como de usuarios, supera el 80%". A su vez, el escrito remitido desde el área de Desarrollo y Bienestar Social, recuerda que la Diputación de Cádiz dedica 16 millones de euros al año a mantener los centros propios de mayores, de los que sólo recupera, según el ente provincial, dos millones de euros provenientes del 75% de la pensión de los usuarios y el resto de la Entidad Autonómica competente, a través de la Agencia Andaluza de la Dependencia, "siendo las residencias más baratas y donde se alcanza un mayor nivel de satisfacción, cumpliendo así sobradamente con su finalidad social".

"Queda manifiesta la voluntad de esta Corporación provincial de apostar por las políticas sociales, en concreto a la atención especializada de las personas mayores en estos centros socio-sanitarios que tan elevado coste suponen a las arcas públicas en estos momentos de difícil situación económica", según el escrito de la Diputación.