La fragata 'Navarra' regresa el próximo viernes 29 de octubre a la Base Naval de Rota una vez finalizada su participación en la operación Atalanta.

Concluye así un exigente despliegue de más de cinco meses navegando en aguas del océano Índico. La participación en la operación Atalanta se enmarca dentro del compromiso de España con la Política Común de Seguridad y Defensa de la UE (PCSD) de garantizar la seguridad en el ámbito geográfico del cuerno de África y el Índico.

El buque de la Armada española zarpó también de Rota a finales del pasado mes de mayo en un acto muy emotivo ya que fue la primera desde el inicio de la pandemia que los familiares pudieron acudir a la ceremonia.

Una participación anticipada

La Navarra tenía previsto participar en esta operación contra la piratería pero su incorporaría iba a ser más tarde. Sin embargo, tuvo que adelantar su salida para relevar al buque Castilla, que sufrió una grave avería que propició su regreso precipitado a Cádiz.

Información técnica

La Fragata Navarra es la quinta de las seis fragatas clase 'Santa María' que componen la 41ª Escuadrilla de Escoltas. Entró en servicio en 1994 y, desde entonces, ha participado en numerosas operaciones y despliegues como 'Libertad Duradera', 'Operación Atalanta', 'Operación Sophia', en la operación 'Romeo Sierra', como se denominó oficialmente la conocida también como 'Operación Perejil', y en la 'Operación Socotra' de asalto a un buque sospechoso de tráfico de armas, el So San, en aguas del golfo de Adén.

El buque, está al mando del Capitán de Fragata José Luis Guevara Romero. El objetivo principal de esta misión de la Unión Europea, en la que la Armada ha tenido presencia desde su inicio, consiste en la protección y garantía de la seguridad del tráfico marítimo en la zona y en la lucha contra la piratería en aguas del Golfo de Adén y cuenca este de Somalia.

El 1 de enero de 2021 entró en vigor la Decisión (PESC) 2020/2188 del Consejo, que prorroga el mandato de la Operación Atalanta de la Fuerza Naval de la Unión Europea en Somalia por dos años más, hasta el 31 de diciembre de 2022. El nuevo mandato incluye tareas que refuerzan el papel de Atalanta como factor de seguridad marítima en la zona. Así, a partir del 01/01/21, se ha iniciado la vigilancia de nuevas actividades, como la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada y el tráfico de drogas, armas y carbón vegetal.