Ana Borrosa triunfa en Sabadell

La puertorrealeña Ana Borrosa, graduada en la especialidad de Coreografía e Interpretación en el Conservatorio Superior de Danza (CSD) de Barcelona, ha ganado el primer premio de la XIII edición del Certamen Coreográfico de Sabadell, celebrado en el teatro de Ca l’Estruch (Sabadell). Borrosa ha ganado el premio por Pinkfish, una adaptación más reducida, tanto en tiempo como en el número de bailarinas, de la pieza que presentó en abril del año pasado como trabajo de fin de carrera. “Tuvimos que adaptarnos a un nuevo espacio y a las condiciones del concurso, al que presenté una versión más cruda y desnuda. La versión ‘sashimi’, como bromeábamos durante los ensayos”, explica la coreógrafa.

Era la primera vez que concursaba en este certamen, uno de los más destacados del territorio nacional, especialmente en Cataluña, en el que participaron 7 coreografías finalistas de las 30 presentadas en convocatoria abierta. Además del premio del certamen, consistente en una aportación económica de mil euros, una residencia de creación en el Estruch y el estreno de la pieza en la programación profesional del centro, Ana Borrosa también logró el premio del público, que incluye la participación en un taller de formación del Certamen Coreográfico de Madrid.

Estos premios son el reconocimiento a meses de trabajo de Ana y de todo su equipo que se ha volcado con la coreografía y ha trabajado muy duro. “La primera versión se trabajó desde enero hasta abril”, explica Ana Borrosa. “Puse mucho esfuerzo en los detalles porque no es solo crear los pasos de una coreografía, se cuidó al detalle la dramaturgia, la escenografía, el vestuario o la iluminación”, añade. Es precisamente la genial puesta en escena uno de los principales atractivos de la obra creada por la coreógrafa, quien antes de estudiar en el Conservatorio se licenció en Arquitectura en la Universidad de Sevilla.

El Certamen Coreográfico de Sabadell es una plataforma creada para dar a conocer el trabajo de los coreógrafos emergentes. El jurado de esta edición estaba formado por diferentes representantes del ámbito de la danza, entre los que el figuraban el director del CSD, Alexis Eupierre, y el director del Instituto del Teatro de Vic, Carlos Salas.