Israel deja en libertad a 200 palestinos presos en cárceles del país como gesto de buena voluntad, según acordó hoy el gabinete de gobierno en Jerusalén.

Con esta medida para generar confianza se pretende reforzar el diálogo con la cúpula palestina y el proceso de paz, dijo el portavoz del gobierno, Mark Regev. Con esta liberación se quiere demostrar que con las negociaciones, la moderación y la reconciliación se pueden alcazar logros palpables, añadió.

El primer ministro de Israel, Ehud Olmert, prometió liberar a estos presos durante la conversación que mantuvo el pasado 6 de agosto con el presidente palestino, Mahmud Abbas.

Isreel, según palabras de Olmert, quiere demostrar así que la liberación de presos palestinos es posible por la vía del diálogo y no recurriendo a la violencia.

Por su parte, también el presidente palestino Mahmud Abbas quiere demostrar a la opinión pública palestina que los logros son posible mediante las negociaciones con Israel.

Hasta la fecha, tanto la milicia proiraní de Hizbollah en Líbano como la organización redical islámica de Hamas en la Franja de Gaza han argumentado el secuestro de soldados israelíes porque Israel no se sentaba a negociar la liberación de presos palestinos.

En opinión de ambas organizaciónes solo queda la violencia, para por ejemplo presionar por la liberación de los palestinos con largas condenas de cárcel.

Hamas exige por ejemplo que se libere a cerca de un millar de los 8.500 reos palestinos en cárceles israelíes a cambio del soldado israelí Gilad, secuestrado en 2006.

Entre las 200 personas que ahora saldrán a la calle figuran, según el portavoz Reguev, palestinos con las "manos machadas de sangre". Con este término se alude en el gobierno israelí a las personas que han cometido atentados.

El pasado 16 de julio, Israel dejó en libertad al terrorista libanés condenado a varias cadenas perpetuas Samir Kuntar a cambio de los restos mortales de los soldados israelíes Ehud Goldwasser y Eldad Regev.