La presidenta del Gobierno regional madrileño, Esperanza Aguirre, ha advertido hoy de que el Estado "podría" no hacer efectivos los "anticipos a cuenta" que prometió el Gobierno a ayuntamientos y Comunidades y ha explicado que Pedro Solbes ha remitido una carta en este sentido.

Aguirre ha precisado que las Administraciones locales y autonómicas han recibido ayer una carta del vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, en la que avisa de que, para hacer frente a la crisis, podrían no hacerse efectivos esos "anticipos a cuenta", unas partidas que la jefa del Ejecutivo regional considera incluso "pagos con retraso".

Al término del acto de inicio de las obras de desdoblamiento de la carretera M-404, la presidenta autonómica madrileña ha calificado de "positivo" que el Gobierno, por medio de Solbes, reconozca que España vive un periodo "realmente dramático" de recesión económica, pues a su juicio, eso es "muy importante" para poder tomar medidas que saquen el país adelante.

Según la presidenta, el Gobierno ha pasado "demasiado tiempo queriendo falsear la situación", evitando "llamar a las cosas por su nombre" y "levantando el puño en alto para decir que van a hacer una serie de medidas demagógicas a las que ya nos tienen acostumbrados".

En lugar de eso, ha dicho, se debe reconocer la recesión y después adoptar medidas de austeridad económica que hagan salir a España de la crisis y el desempleo.

Aguirre ha recalcado asimismo que la parte "beneficiosa" de esta crisis estriba en que las instituciones públicas asumen "un esfuerzo de austeridad cada vez mayor", cumpliendo siempre con su "deber de obligación" con los ciudadanos e "imponiendo" el ahorro "a todos los niveles".

Se ha mostrado convencida de que la Comunidad de Madrid "saldrá adelante cuanto antes" de esta crisis y ha afirmado que las Administraciones públicas (ayuntamientos y comunidades) harán "un esfuerzo de austeridad cada vez mayor a todos los niveles" y no habrá ningún gasto más allá de los "estrictamente necesarios".

Ha recordado igualmente que los alcaldes sufren especialmente los efectos de la crisis, porque ven descender sus ingresos locales ahora "temen" que no lleguen los "anticipos a cuenta" que prometió el Gobierno y que, en su opinión, no son sino "pagos con retraso".