Más de 800 personas asistieron en la tarde noche del sábado a la Velada Multicultural de la Barriada de Los Milagros, que ha vuelto con fuerza después de varios años de parón por la pandemia y donde se puso de relieve la riqueza del mestizaje y de la convivencia entre distintas culturas y tradiciones, haciendo hincapié en el folclore, la música y la gastronomía.

Participaron en el encuentro 14 países, cuyas comunidades se mostraron ilusionadas con la actividad, ofreciendo en los stands bebidas típicas de cada región y platos tradicionales, en ocasiones muy distintos a los que son conocidos a nivel general. La mayor parte de los stands se instalaron en la plaza Joaquina de Vedruna, muy cuidada para la ocasión, y que se transformó en el eje central de la convivencia, registrando un paso incesante de público para disfrutar de la velada.

El concejal Javier Bello, junto a la presidenta de la barriada de Los Milagros Roxana Cavero, y las voluntarias.

En esta tercera edición, el encuentro estuvo organizado por la asociación de vecinos de Nuestra Señora de los Milagros, el Ayuntamiento (en especial la Concejalía de Participación), la Fundación La Vicuña y la empresa Línea 2, que facilitó los materiales a las comunidades participantes, con un guiño especial a Ucrania, que instaló un stand muy cuidado, atendido por mujeres ataviadas con trajes regionales y donde se mostraron elementos y productos típicos del país.

Destacó igualmente la participación de la asociación gitana del barrio, que ofreció degustaciones de sus platos, siendo notable la implicación en la actividad de la propia barriada y de inmigrantes que residen en distintas ciudades de la provincia, en especial de América Latina. 

A lo largo de la noche visitaron la fiesta concejales del equipo de gobierno y de la oposición, políticos de anteriores corporaciones y vecinos de los barrios colindantes.

El stand de la asociación Cultural Gitana 'Alachar Andró'.

En cuanto a las actuaciones musicales, se instaló un escenario en la plaza principal, en el que abrió cartel el grupo Luna Gitana, que actuó al principio de la velada, y la pareja colombiana Sandra y Nicolás, que ofreció música tradicional andina. El final de fiesta, ya entrada la medianoche, estuvo a cargo del cante flamenco de Niño Villar. 

Cabe destacar el trabajo de la asociación de vecinos, presidida por Roxana Cavero, y la colaboración de unos 30 voluntarios de la propia asociación, que llevaron el bar y controlaron distintas cuestiones organizativas. 

En definitiva, el público y los participantes disfrutaron de una velada internacional, marcada por el mestizaje, divertida y con un ambiente muy familiar, donde se estrechó la convivencia entre las diferentes comunidades que residen en la barriada.