Volantes, escotes y muchas flores

El traje de flamenca sigue siendo la estrella de la Feria por muchos años que pasen. Dichos vestidos han ido cambiando a lo largo de los tiempos para adaptarse a la moda de cada año, pero también en ella influyen las tendencias de la diferentes pasarelas de moda flamenca que tienen lugar en las ciudades vecinas de El Puerto.

La peculiaridad que existe en la Feria portuense es que no hay reglas estrictas a seguir en cuanto a trajes de flamenca se refiere. Cada mujer recoge dichas tendencias y las adapta a sus gustos, haciendo que cada vestido sea original y diferente al resto. En ello también influye la tradición de confeccionar los trajes hechos a medida por diferentes costureras portuenses. Aunque dicha labor y la originalidad de cada traje se está viendo cada vez más eclipsada por las tiendas de moda flamenca que venden muchos trajes iguales con similares complementos y todo ello al menor coste. Entre las tendencias que este año veremos por el recinto ferial, se afianzan más entre las porteñas los volantes canasteros, siguiendo la moda sevillana. Aunque no son los únicos que predominan, también están a la moda los microvolantes y los grandes volantes moldeados con tela de cancán para elevar su vuelo. Muchos tipos de volantes pero con un denominador común, todos nacen en las mangas y en la parte baja de la falda de los vestidos largos y en la cadera en los trajes cortos.

Hay quién dice que ya los trajes cortos pasaron de moda, y están equivocados. Este tipo de vestido también se ha adaptado a las tendencias de los vestidos largos. Llevan encajes, lunares de todos los tamaños, estampados florales, micropreforados, grandes escotes y sobre todo tonos pastel, una de las novedades más importantes de este año.

Aunque los colores pastel como el celeste, el salmón o el rosa palo predominen, nunca destronarán al rojo pasión, color que además es tendencia durante esta primavera en la moda casual y que también predominará en todas las ferias de Andalucía. Sin olvidarnos del blanco, el negro o el beige que son los que mejor combinan con toda la gama de colores.

En cuanto complementos, las flores grandes en la parte de arriba de la cabeza se han impuesto ante la flor al lado. Pero además de las flores de gran tamaño, también se encuentran flores en cinturones, pulseras, peinetas, estampados e incluso coronas de flores al estilo romántico en vez de la tradicional flor. Esta tendencia floral está inspirada en la moda sevillana, en la cual algunas mujeres llevaban flores por encima de sus posibilidades, llegando a alcanzar un estilo totalmente recargado e incluso barroco.

Otra de las novedades es el uso de flecos de cualquier tamaño cosidos directamente en el filo del escote y espalda del traje sustituyendo al tradicional mantoncillo. Un adorno que hace que el vestido sea completamente otro diferente en cuanto a combinaciones de colores se refiere. Pero tampoco ha quedado retirado del mercado el mantoncillo, siempre por encima de los hombros y bien cogido con un broche a conjunto da un toque elegante a la flamenca. Además cada vez vemos más bolsos pequeños que dan seguridad y juegan en conjunto con los colores de los flecos y del traje en general, para así sustituir el incómodo bolsillo entre los volantes.