Ayer fue un día grande para la parroquia de La Palma. El obispo, José Mazuelos, bendecía la nueva capilla de Santa Catalina, construida en Las Redes. El templo, diseñado por el arquitecto Marcos Cortada, es un barco cuyo diseño evoca al Arca de Noé

La consagración de un templo es una celebración con un ritual muy característico . En primer lugar se celebraba una procesión por el exterior para hacer una entrada solemne. Una vez concluida no tenía lugar un gesto habitual en los comienzos de la eucaristía. Los celebrantes, en este caso el obispo acompañado del párroco de La Palma, Julio Juez, no besaban el altar puesto que aún no estaba bendecido (en ese momento sobre él se encontraban únicamente dos velas encedidas). Se iniciaba, entonces, la eucaristía y se invitaba al arquitecto a que explicara los pormenores de la capilla. Cortada incidía en los detalles simbólicos del templo. Para empezar, su forma exterior en forma de barco y su planta, con diseño de pez, aunque el templo aún no está concluido puesto que queda una segunda fase por ejecutar donde irá el sagrario (se ha habilitado temporalmente un espacio junto al altar) y los salones parroquiales. Terminaba sus palabras y la feligresía le agradecía su trabajo con un sonado aplauso. Inmediatamente después se hacía entrega de manera simbólica al prelado asidonense de las llaves del templo por parte del jefe de obra. Acto seguido Mazuelos procedía al rito de la aspersión con el agua bendita a los asistentes y a la lectura del Evangelio. El rito de consagración no era hasta después de la homilía y el rezo de las letanías. La unción del altar y de los muros de la iglesia, la cremación del incienso y el revestimiento del altar con manteles blancos son ritos que no se ven habitualmente. Porque, tal y como resaltaba Mazuelos, la noche de ayer fue un día de "gran alegría" para la Diócesis. "Consagrar una nueva iglesia es muestra inequívoca de que la parroquia es una comunidad viva", apuntaba.

El obispo recordaba, además, lo rápido de la construcción de este templo. De hecho, apenas llevaba unos meses al frente de la Diócesis cuando acudió a este enclave ubicado entre Las Redes y El Águila para poner la primera piedra de lo que hoy es una realidad.

Mientras tanto, la antigua capilla de chapa continuará teniendo uso mientras no se ejecuta la segunda fase del proyecto. Todo dependerá de los recursos económicos con los que cuente la parroquia. Por otro lado la capilla contará con una reliquia de Santa Juana Jugan, fundadora de las Hermanitas de los Pobres. Algunas de las integrantes de la compañía estuvieron en el acto de anoche para entregarlas.