Las aguas del Río San Pedro fueron objeto de una limpieza a cargo de una treintena de voluntarios que dedicaron la mañana del sábado a navegar en kayaks mientras recogían residuos que encontraban en su navegación, en una iniciativa impulsada por el Parque Natural Bahía de Cádiz de la Junta de Andalucía con la colaboración del Ayuntamiento de El Puerto de Santa María, el Vicedecanato de la Facultad de Ciencias del Mar y Ambientales de la UCA, el Foiling Base Cádiz y el Instituto Municipal de Deportes de Cádiz.

Acudieron a la cita el delegado de Medio Ambiente del Ayuntamiento de El Puerto, Millán Alegre; el decano y el vicedecano de la Facultad de Ciencias del Mar y Ambientales de la UCA, José Antonio Perales y Javier Benavente, respectivamente; Gabriela Huertas, Team Support de SailGP, Rafael Martín, director conservador del Parque Natural Bahía de Cádiz y el secretario general de la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía en Cádiz, Juan Niño, además de una treintena de voluntarios, en su mayoría alumnos de Ambientales de la UCA y participantes en el tercer Clínic de la Foiling Base Cádiz impulsada por SailGP Inspire, además de los tripulantes del equipo español de F50 de SailGP, Diego Botín y Florian Trittel.

En principio, la planificación anunciaba que el acceso al río se realizaría desde dos embarcaderos, el de la UCA y el del Parque Natural, en una actuación que se realizaría por dos equipos de alrededor de 15 embarcaciones ligeras tipo kayak o paddle surf cada uno con una embarcación auxiliar tipo zodiac, aunque finalmente y debido al fuerte viento de levante imperante, las tablas a remo no fueron utilizadas.

Un equipo fue el compuesto por voluntarios de la UCA y el otro, por los participantes de los campamentos de la Foiling Base Cádiz en el CN Elcano, los cuales fueron depositando los residuos en sus cubos reciclados para luego, ir vaciándolos en bolsas en las zódiacs y de ahí, al punto de recogida en Los Toruños, donde se llevaría a cabo el pesaje y clasificación, para después entregarlos a los servicios municipales de recogida de residuos.

Una vez expuestos en una nave los residuos rescatados del Rio San Pedro, llamaba la atención una enorme y maloliente arte de pesca, sacada tras haber quedado atascada en rocas tiempo atrás. Los expertos señalaron que conviene recoger los residuos plásticos antes de que se conviertan en microplásticos, ya que una vez pasa el tiempo y adquieren este tamaño es imposible extraerlo, por lo que abogaban por actuaciones de concienciación y colaboraciones futuras para recoger los residuos con frecuencia para evitar la degradación del plástico tan dañina para el hombre, la fauna y el medio ambiente.