"Mantener un local comercial vacío es algo que nadie se puede permitir"

Que el futuro de la ciudad en general y del centro en particular preocupa es una realidad más que tangible y fácilmente contrastable, ya que cada vez son mas los colectivos de ciudadanos que no solo se preocupan por el deterioro implacable al que se ve sometida la ciudad que antaño fue el referente de la Bahía, sino que intentan aportar sus ideas para intentar corregir el rumbo de una nave que cada día se escora más y más con un grave peligro de hundimiento.

Elisa María Gutiérrez Colosía, al frente de su Foro Abierto, ha traído como invitadas a la ciudad a dos artistas desde San Francisco (California).

Aprovechando su estancia y dado que la especialidad artística de ambas tiene mucho que ver con la regeneración de zonas abandonadas tanto del centro como de otros barrios incluidos los considerados marginales, este periódico ha querido conocer sus opiniones sobre el estado actual del centro histórico de El Puerto.

Paz de la Calzada (La Coruña) y Mona Caron (Suiza) tienen varios denominadores comunes. Ambas residen en San Francisco desde hace años, ambas llegaron a la capital de California de forma casual y ambas se quedaron y residen en ella donde ejercitan sus especialidades artísticas. El dibujo, la escultura y la instalación, así como el denominado arte público, que no es otra cosa que aplicaciones artísticas en el entorno urbano para la española y el muralismo para la suiza.

Sobre el centro de la ciudad, Paz lo tiene muy claro y opina que "la falta de comercio refleja la realidad del país, no es un problema autóctono de la ciudad sino que refleja lo que existe en el país". Con claridad meridiana continua expresándose: "Me parece increíble que en una ciudad como El Puerto, con un carácter histórico tan marcado, el Ayuntamiento no apueste ni sienta ninguna preocupación por apoyar los intereses culturales".

Por su parte Mona afirma con rotundidad que "hay muchas maneras para que al arte se convierta en el rol que una a la población para exprimir los valores que pueden revitalizar el centro. El aislamiento se puede suprimir con un tipo de arte preciso y con un espacio determinado. El arte es una manera de unir a una comunidad que se puede sentir aislada y promocionar esperanzas nuevas de forma natural y autónoma sin tener que pensar en los políticos", explica.

Para ambas, y desde sus postulados artísticos, "lo primero que habría que hacer es crear un censo de artistas y reunirlos en una asociación a la que las autoridades locales deben escuchar y canalizar sus propuestas, y desarrollarlas en el centro histórico artístico de la ciudad, como un elemento mas de dinamización y desarrollo".

Igualmente señalan que "los cascos vacíos de la zona bodeguera, que cuentan con una arquitectura tan peculiar, tan propia y tan reconocida mundialmente, pueden y deben ser este espacio que los diversos colectivos culturales de la ciudad precisan y necesitan".

Ambas se muestran muy preocupadas por la cantidad de locales vacíos en el sector del comercio. Sobre este hecho, Mona considera que "un local vacío es algo que nadie se puede permitir" y ambas se ponen de acuerdo al afirmar que "estos escaparates vacíos pueden ser el principio de esa regeneración, ya que la cesión de estos a artistas determinados, donde estos puedan desarrollar su actividad durante un tiempo, a modo de una galería de arte abierta, les puede dotar de un atractivo comercial que poco a poco vaya despertando el interés del público y por tanto que los negocios vuelvan de nuevo a una zona de la ciudad de donde nunca debieron salir", indican.

Con las salvedades que distan entre San Francisco, donde residen y El Puerto, donde están de visita, ambas se ponen una vez más de acuerdo y dejan claro que "el centro de una ciudad no es una zona aislada, lo es todo. El centro histórico puede ser compatible con el desarrollo, lo único que hay que hacer es pensar y programar qué cabe en cada espacio, ya que cada parte de la ciudad tiene su espacio de aprovechamiento y arte".