Los seguidores del Arturito

Localidad: Cádiz

letra. José Manuel Sánchez Reyes.

música. José Martínez González.

director. Jesús María Silva Chanivet.

el tipo. El Rey Arturo y los caballeros de la mesa redonda.

En semifinales:

La corte más loca (con permiso de los Monty Phyton) toma el castillo de los ladrillos coloraos en una nueva acometida, en una nueva batalla donde siempre gana la risa, la carcajada, la chirigota. Un completo pase de 'Los seguidores de Arturito' los hacen valedoras de esa espada chirigotera "forjada por forjadores" que también fueron grandes caballeros de la modalidad. Tras una presentación que sigue resultando simpática y un popurrí de lo más completo donde hay momento para todo (los golpes, un toque de parodia, la emoción), los chirigoteros se ponen serios y sentimentales, a partes iguales, para acometer sus dos pasodobles que, quizás, tienen la pega de una melodía que termina algo abajo y queda menos alegre. En la primera letra, Sánchez Reyes pone las cosas en su sitio y distingue entre los grandes estafadores y la economía sumergida a la que algunos "con mucha poca vergüenza" apuntan como motivo también de la crisis. Que España "se desangre" porque un padre venda "cuatro boquerones" no se lo cree nadie. Siguiente, un canto a la amistad para recordar en estos tiempos duros lo que ayuda tener a esa otra familia al lado que son los amigos. Sencillo y emocionante. Gran segundo cuplé al cumpleaños de Cristiano Ronaldo (no lo suspendió porque se iban a poner malos los sandwich de nocilla) que termina en Cádiz porque "reparten condones". El primero, a los rollazos gastronómicos, tampoco está malote. A caballito de nuevo, ojalá su destino sea la final.

En cuartos:

A pesar de que pierden el golpe de efecto que causa la sorpresa del tipo en preliminares (ni fans del carnavalero de Barbate, ni de votantes de Artur Mas) la presentación de los caballeros de la tabla redonda no pierde vigencia. Y el rey Arturo sigue sacando a Excalibur a pesar de sólo tener "una rondeña en el cuerpo". Pero si los chirigoteros destacan en este pase es por un gran cuplé a la comparsa de Sevilla. Comprensivos se muestran, como caballeros que son, con el repertorio de la agrupación dedicado a la capital andaluz, eso sí, al final le recuerdan que el móvil con el que hicieron el selfie se cargó "con un cargador y no con un costalero".Cai. El primer cuplé, p eor, claro, con golpes visuales, ya que se trata de los parecidos de los chirigoteros con diferentes personajes. Otro punto fuerte de esta agrupación es su popurrí, que tampoco pierde gracia en una segunda escucha. Muy equilibrados, esta vez, en cuanto a repertorio y show personal . Los pasodobles, quizás, algo más modestos. En el primero muestran su desengaño con la política y en el segundo hablan de cómo ven una relación amorosa madura. "A caballito nos vamos" a semifinal.

En preliminares:

Gran golpe de efecto con su tipo. No es nuevo en esta chirigota que siempre juega a quedarse , amablemente, con nosotros pero esta vez incluso nos endiñan dos vueltas de tuerca. Ni son los fans del famoso comparsista pero tampoco votantes del independentista catalán. ¡Son los caballeros de la mesa redonda! Con su rey Arturo-Popo animando el cotarro. Nos sorprende el tipo y nos atrapa la presentación con muy buenos puntos. “Xavi Hernández” es “catalán chico” y sacar la espada clavada en la piedra traza analogía con nuestros gobernantes “que nos la meten y es difícil que la saquen”. Y Arturo-Popo la saca y hace el grito de Cristiano en la gala del Balón de Oro. Equilibran entre parodias y las letras. Quizás más parodia en el popurrí, pero con este grupo, quién no se lanza (el asalto al castillo, la cabalgada y la última cuarteta entre los grandes momentos). Pasodobles nostálgicos en letra y en música (aunque, quizás la melodía está rematada de una manera que no la encajaba yo con este grupo). La primera letra es un alegato del autor a este carnaval que en nada se parece a la fiesta que él mamó. “¿Por qué seguir en esta guerra?” se pregunta en una pieza muy bien estructurada. En el siguiente, muy crítico con “la ciudad fantasma” acompañamos a un gaditano que vuelve a su tierra para recorrer lugares que ya no existen. Muy bueno el segundo cuplé donde su prima se echa encima un nórdico y más flojito el primero aunque destaca las formas de la pieza medieval-chirigotera.