Muchos gaditanos nos hemos venido quejando en los últimos años de las aglomeraciones del Carnaval en febrero y veníamos pidiendo un Carnaval más local, más nuestro. Ahora, en mayo, en esta fiesta forzada, echamos de menos al público. Ni tanto ni tan calvo. El exceso de un febrero cualquiera impide un desarrollo tranquilo y desahogado del cante, pero con tan poca gente como se ha visto este Lunes de Coros, tampoco luce el esfuerzo de las agrupaciones que son, como siempre, las que nunca fallan. 

Ha sido un Lunes de Coros familiar con concentraciones de público en lugares muy concretos, casi siempre protagonizados por agrupaciones del COAC con tirón. Como es el caso de la comparsa 'Los renacidos', que cantó a los pies de la Torre Tavira ante un gentío y luego se disponía a dar otro pase en el Oratorio de San Felipe. También había un considerable público escuchando a la chirigota 'La Viña contraataca' en la escalerilla de Correos. Esperaba su turno la comparsa de Tocina 'La división extranjera'. Cerca, en La Bombilla, buen ambiente para escuchar al coro 'Los babeta', que interpretaba su repertorio a pie debido a una avería de su batea. 

Ofrecían sus tangos por la Plaza 'Carrera Oficial', 'El telón', 'La fábrica de conservas' o el coro callejero de Luis Frade y Quique Valdivia 'Un coro de la hostia'. Ante la falta de público, los hosteleros de los alrededores del Mercado Central echaban de menos sus mesas, con las que hubieran sacado más rendimiento económico a la tarde-noche. 

Se podía escuchar con tranquilidad en el Oratorio. Por ejemplo, a la comparsa 'Cantando bajo la lluvia' alrededor de las nueve y media de la noche. Luego iba a actuar el romancero 'El rey y la reina', con Jesús Trujillo y Dani Illescas. 

En la plaza de Mina también estaban algunos coros como 'Pachamama' o 'Su majestad', ambos rodeados de público sin empujones, y ya había alcanzado la plaza de San Francisco 'El carromato de los niños', la antología de Nandi Migueles. 

Buena megafonía para pocos espectadores en El Mentidero con motivo del Concurso de Presentaciones, aunque sumando los comensales de los diferentes negocios hosteleros el auditorio crecía. Quince minutos antes de las diez ofrecía sus coplas 'Los veleros, una comparsa de toda la vida' de Nene Cheza

Antes, sobre las siete de la tarde, había bastante gente escuchando pasodobles y cuplés en Candelaria. En el concurso de la peña La Estrella estaba cantando 'La Viña contraataca'. El Concurso de Popurrís de La Viña comenzaba puntual en su primera jornada, a las nueve, con no más de 40 personas ante el tablao, aunque poco más tarde se fueron congregando más personas. 

Ha sido el Lunes de Coros más tranquilo que se recuerda y que, afortunadamente, el año que viene en febrero, no se repetirá.