Durante la tarde del lunes de la presente semana se llevó a cabo un nuevo encuentro virtual organizado por el Aula de Fútbol de la Universidad de Cádiz, perteneciente al programa Fútbol en el Aula. En esa vídeo-charla, bautizada como "Fútbol femenino: fútbol emergente", participaron cuatro técnicos de la provincia que plasmaron sus puntos de vista a través de su experiencia. Fueron Emilio Soler, entrenador del Cádiz CF femenino; Misael Rodríguez, director deportivo de la cantera del Atlético Sanluqueño; Fernando Pastrana, coordinador del Ciudad de Cádiz femenino; y Kike Barroso, seleccionador andaluz sub'15 femenino.

En el encuentro se quiso dar a conocer la realidad actual del fútbol femenino y los obstáculos con los que se topan los entrenadores a día de hoy. Los protagonistas, moderados por David Almorza -director del Aula de Fútbol de la UCA y técnico del San Fernando B-, fueron desarrollando diferentes temas, desde los inicios de cada uno hasta la evolución que ha ido sufriendo este deporte, pasando por la implicación (o no) de la Federación. Los participantes narraron cómo empezaron en el fútbol femenino, casi todos por casualidad, y como cada uno de ellos se quedaron prendados con la modalidad, una vez descubiertos todos sus entresijos.

Ya entrados en materia, los cuatro técnicos repasaron las dificultades que se han encontrado a lo largo de los años, coincidiendo todos en que lo más complejo es superar los conflictos que aparecen desde la base. Kike Barroso comentaba que en los equipos femeninos empiezan desde cero, sin apenas haber tenido contacto con este deporte, a diferencia del fútbol masculino y esto complica el inicio de los equipos.

Fernando Pastrana recalcaba los grupos tan heterogéneos que se forman en la categoría y que complican la evolución, así como la falta de competitividad en las ligas porque suele haber mucha diferencia entre los dos primeros equipos en comparación con el resto.

Emilio Soler también destacaba que hasta día de hoy no se había conseguido tener muchas futbolistas en la provincia mayores de 25 años y esto refleja que hace aún muy poco tiempo no se potenciaba este deporte en el público femenil.

Respecto a la evolución a nivel deportivo, todos están de acuerdo en que se ha avanzado considerablemente, sobre todo en el punto citado anteriormente del fútbol base, que es la clave de todo el progreso.

Aunque durante toda la charla hubo consenso sobre la mayoría de los temas, el asunto de la implicación de la Federación sí mostró alguna diferencia de opiniones. Hubo quien sí respaldaba todo lo que está llevando a cabo el organismo y quien reclamaba más atención y recursos al fútbol femenino para continuar con el desarrollo que está teniendo.

Finalmente, los técnicos fueron preguntados por los asistentes a la vídeo-charla sobre las diferencias entre las categorías masculina y femenina. Aunque todos coincidieron en que la mayor desigualdad radica en el tema táctico, hicieron hincapié en que no hay tantas disparidades como se piensa. Recalcaron, además, que este aspecto que las diferencia no tiene por qué ser negativo, más bien al contrario.

Emilio Soler, respaldado por el resto de participantes, afirmó que el entusiasmo que se vive en el fútbol jugado por mujeres no se vive en el de hombres, y que hay una unión mucho mayor dado que no existe la lucha de egos que puede haber en el fútbol masculino.

También resaltaron los cuatro entrenadores sobre este deporte en categoría femenina la ilusión, la devoción y el compromiso con los que todas las chicas se unen al equipo y estuvieron de acuerdo al ser preguntados sobre si el fútbol femenino era moda o necesidad en que "es una necesidad y una realidad que ha venido para quedarse", como apuntó el seleccionador autonómico Kike Barroso.