Adrián López Arcila, conocido futbolísticamente como Adri López, es uno de los juveniles que cuenta con más minutos en el primer equipo recreativista. Con solo 17 años, durante la presente campaña ha sido titular en tres encuentros, partiendo en ocho desde la suplencia. La jornada anterior, en el partido contra el Tarifa UD, ocupó el lateral derecho debido a la ausencia de Kike, habitual inquilino de la demarcación.

“Fuimos superiores ante los campogibraltareños y nos fastidia haber perdido cuando ellos apenas gozaron de ocasiones”, refleja el jugador, que admite que en los primeros minutos de la contienda se sintió “más nervioso”, para irse ubicando después y cuajar la que considera “buena actuación”.

Adri López empezó a jugar con 9 años en el San Marcos (benjamín de 2ª), pasando posteriormente a la Barriada de La Playa (infantil de 1º) antes de ingresar en el Recreativo en infantil de 2ª, entidad en la que ha desarrollado el resto de su incipiente carrera. Tras comenzar en infantiles en el lateral izquierdo o como central pasó a ocupar el lateral derecho en cadete de 2ª, posición que ya no ha abandonado.

“El lateral tiene, obviamente, que defender, pero a mí me gusta atacar, disfruto subiendo”, refleja el joven, quien estima la existencia de “buen ambiente en el vestuario, así como entre jugadores y técnico”. Adri López piensa que “queda poco para asegurar la permanencia”, una tranquilidad que supondría que los juveniles pudieran gozar de más minutos sobre el césped.

El futbolista, que tiene un papel importante en la cantera, en Tercera Andaluza Juvenil, luchando por el ascenso, pronostica que el próximo reto, el partido que el senior recreativista disputará el domingo, a partir de las 17:30 horas, en el campo de La Unión, en San Roque, frente al CD Guadiaro, será un encuentro “ante un equipo que lucha por mantenerse y cuyo público aprieta mucho”.

El CD Guadiaro viene cuajando una mala campaña: decimoquinto, con 28 puntos, a nueve de los rojiblancos, pelea por conseguir una salvación que ya logró el ejercicio anterior tras un último tramo de competición espectacular, aunque hasta ahora no ha dado indicios de poder repetir esa arrolladora serie.En el partido de ida, que concluyó con empate a cero, se mostraron como una escuadra compacta, que a punto estuvo de protagonizar un susto en el Marcos Monge, pero los números no le han acompañado en las semanas siguientes.

Los portuenses viajan sabedores de que todo lo que sea puntuar en este desplazamiento apuntala el objetivo de seguir en Primera Andaluza, pero no descuidan la circunstancia de que una hipotética derrota despertaría cierta intranquilidad. Los de Juanjo Durán quieren dejar atrás la mala segunda parte ante el Tarifa, que conllevó una dolorosa derrota en casa (0-2) y puntuar, de modo que cuenten con opciones de certificar prácticamente la salvación ante su público, logro que rozarían si se imponen en la siguiente cita a un San Fernando B que cada vez tiene más difícil evitar el descenso.

Los guadiarenses se presentan con mayor capacidad realizadora que su rival (39 goles por 33) aunque, en cambio, son débiles en defensa (52 tantos contra 38), vulnerabilidad en la que reside su delicada posición clasificatoria.