Uno es extrovertido, un pelín chulapo y agresivo sobre su motocicleta. El otro es más tímido, callado, pero más 'fino' a la hora de pilotar. A uno le gusta más el espectáculo, de hecho, sus celebraciones tras ganar una carrera suelen ser sonadas y, por tener, tiene hasta un cómic en el que es el protagonista. Al otro, sin embargo, le gusta serlo sólo en la pista y cuando gana no le gusta hacer numeritos. Uno reconoce que cuando en Yamaha ya no esté Rossi "tendré que ser yo el que saque las habichuelas", mientras que al otro no le gusta dar sonados titulares. Son Jorge Lorenzo y Dani Pedrosa, sin duda los dos mejores pilotos españoles de la actualidad y la cara y la cruz de este deporte. En lo único que coinciden es en una cosa: no se pueden ni ver después de que tras la primera prueba del Mundial de 2008 Lorenzo recriminara a Pedrosa que no le felicitara tras subir al podio delante de él.

Ahora están en el circuito de Jerez, en una de las pruebas más atractivas del calendario, el Gran Premio de España, una cita que trae recuerdos de grandes duelos como los protagonizados en el pasado, por Crivillé y Doohan hace ya más de una década o entre Rossi y Gibernau, más recientemente, y que mañana con seguridad y si Valentino lo permite, tendrá otro nuevo capítulo con el catalán y el mallorquín.

De momento, lo más recordado de la carrera del año pasado fue el intento del Rey Juan Carlos de pacificar su relación al 'obligarles' a que se estrecharan la mano en el antepalco tras subir ambos al podio. A pesar de todo, ese 'obligado' apretón de manos 'Real' quedó solo en eso. Su relación sigue siendo prácticamente nula y las únicas veces que se les ve juntos es en las obligadas ruedas de prensa tras las clasificaciones o las carreras.

Lo bueno de todo esto es que han creado un pique sano entre muchos aficionados españoles y que ha provocado una división entre 'Lorenzistas' y 'Pedrosistas' que no hace más que darle más alicientes a un deporte que es sinónimo de emoción y espectáculo. Y por si esto fuera poco, el primer puesto de Lorenzo y el tercero de Pedrosa en el Gran Premio de Japón seguro que alimentará todavía más si cabe las ganas de ambos por hacer un gran papel en la cita jerezana. El duelo está servido.