san fernando cd: David Zamora, Castillo, Selu, Sambruno, Nono, Raúl Silveira (Sergio Beato, 63'), Sachetti, Canito (Roberto Rodiel, 63'), Carlitos, Iván Guerrero y Puli. balona: Camacho, Iván Collado, Alberto Merino, Olmo, Antonio Merino, Juampe (Biri, 74'), Carlos Guerra, Copi, Ismael, Liam (David Navarro, 82') y David Hernández (Gallardo, 86'). Árbitro: Milla Alvendiz (sevillano). Amarillas a los locales; Sachetti, Raúl Silveira y Sambruno. Por parte visitante la vieron; Antonio Merino, Ismael, Biri y Carlos Guerra. Expulsó con roja directa a Biri (83'). Goles: 0-1 (38') Carlos Guerra. 0-2 (62') Carlos Guerra. 1-2 (77') S. Beato. 2-2 (87') Puli. Incidencias: Unos 1.200 espectadores en el Iberoamericano de Bahía Sur.

Ochenta minutos tardó el San Fernando en darse cuenta de que estaba jugando un partido de fútbol. Antes, los isleños no ofrecieron nada de nada. Bueno sí, una actitud impropia de un equipo que ha manifestado con su juego sus opciones en otros encuentros. Los de Iriondo estuvieron desconocidos y, de eso se aprovechó, y bien, una Balona que no hizo otra cosa que hacer bien las cosas y sacar rendimiento a su domino. La entrada de Biri y los diez últimos minutos empañaron un partido bueno de un equipo si quiere ganar lejos de su feudo.

En todo esto, el encuentro no fue para enmarcar en su primera mitad. Pocas anotaciones de gol y, por lo tanto, aburrimiento generalizado. Lo dicho, los isleños desconocidos y los linenses, incluso, sorprendidos ante la poca eficacia y mordiente del rival.

A Iriondo no le funcionó el doble pivote defensivo impuesto con el debut de Sachetti, al que acompañó Raúl Silveira y, eso, se tradujo en la falta de un hombre organizador y distribuidor del juego, en definitivo, nada de nada. Y la Balona... los de Escobar, organizados a la perfección esperaban con tranquilidad su ocasión.

Y esta llegó, pero no sin aviso antes. En el 24' Liam, que ayer demostró ser un especialista en lanzar faltas, puso en apuros a David Zamora que vio, en el 38' como un envío de éste era rematado a gol, sin oposición dentro del área por Carlos Guerra. Con la impaciencia isleña y la tranquilidad linense,terminó la primera mitad

La tónica del encuentro no varió tras el descanso y eso proporcionó a los visitantes el segundo tanto, de igual característica que el primero y que tenía que ser definitivo.

Pero no lo fue. Sergio Beato y Roberto Rodiel saltaron al terreno y revolucionaron a su equipo, le imprimieron esta actitud de la que carecía y, en n visto y no visto, a raíz del tanto anotado por el jerezano de magistral falta directa, los isleños se dieron cuenta que estaban inmerso en una batalla deportiva y que había que poner sobre la mesa el coraje suficiente para, al menos, igualar la contienda. Biri, con su autoexpulsión, por una entrada a Beato, contribuyó de lo lindo. El primer gol de Puli esta temporada dio la igualada a un partido que, para ser justo, no mereció dejar en casa ni siquiera un punto.