Olímpica Valverdeña: Nacho, José Ángel, Canterla (Antón, 70'), Durán, Iván, Oliveira (Cristian, 80'), Pichardo, Luis Ligero (Paco, 32'), Pachón, Samu y Carlos Maestre. Puerto Real: Fofi, Garrido, Adri, Romero, Simón (Ureda, 55'), Maki (Venega, 46'), Lora (Mateo, 80'), Juanjo, Valiente, Jordi y Javi Muñoz. Goles:1-0 (13) Luis Ligero. 2-0 (39') Samu, de penalti. 2-1 (65') Jordi. 3-1 (66') Samu. 4-1 (71') José Ángel. 4-2 (82') Romero. Árbitro: López Segura (sevillano). Mostró amarilla a Canterla, Garrido, Adri y Valiente. Incidencias: Cerca de un centanar de aficionados en el Javier López Guilarte 'Zarrita' de Valverde del Camino.

¿Qué fue de aquel 6-2 de la primera vuelta? De ese Puerto Real ya no queda nada. Ni el gusto por la vestimenta. La Olímpica se vengó con una goleada poco honorable, que le pone a rebufo de Los Barrios. Es, sin duda, lo mejor. Lo peor, que Valverde, que se enorgullece estos días de ser la capital mundial de los aficionados al Athletic -al fútbol, en definitiva-, ayer dio la espalda a 'su' equipo. El calor, el culto a los altares y la taquilla tienen mucha culpa.

En lo deportivo, la Olímpica ganó fácil. Y lo hizo desde muy pronto. A estas alturas, los de Manuel Juan Limón son mucho equipo para una defensa tan asustada con el descenso. La diferencia entre objetivos es lo que tiene. Luis Ligero, rápido, puso en funcionamiento el rodillo y Samu, tras un penalti cometido sobre él mismo, sentenció el primer acto.

Pasó poco, pero lo que sucedió fue en favor de los verdiblancos. Acciones rápidas, directas y con finalización por banda, como puñales sobre costados. Control en el centro y claridad en ataque. Buena culpa la tiene Samu. Recibiendo de cara y con espacios tiene genio. De sus botas se escribieron las líneas de mayor peligro de este libro.

Salvo una falta directa, el Puerto Real no tuvo opciones hasta el segundo tiempo. Es el ataque lo más reseñable de este equipo. Sobre el minuto 65, Jordi puso en la escuadra, con la cabeza, un regalo desde la banda. Soberbio. Podría haber sido una sangría, porque José Ángel, en funciones de interior izquierda, marcó el cuarto en el 71. Pero otro tanto aéreo del Puerto Real evitó la hemorragia.